EL PP aumenta en intención de voto para las autonómicas en detrimento del BNG
Galicia
Sólo la mitad de los votantes del PSOE en las generales se declaran fieles a las siglas para los comicios gallegos El PPdeG viaja hacia las elecciones autonómicas del próximo año en una balsa de aceite. El Barómetro de Verano de Sondaxe constata que el partido de Manuel Fraga supera en seis puntos en intención de voto a la suma del BNG y del PSdeG. Los populares incrementan, además, en casi un dos por ciento su bolsa de presumibles votantes, mientras que la formación nacionalista de Xosé Manuel Beiras sufre una recesión que lo sitúa en el 20,9%. Ahora bien, son ambas formaciones las que gozan de unos índices positivos de fidelidad entre sus electores. En cambio, Pérez Touriño sólo consigue mantener fiel a las siglas del PSOE a uno de cada dos votantes que en marzo dieron su confianza al proyecto de Joaquín Almunia.
02 Jul 2000. Actualizado a las 07:00 h.
Después de once años en la Xunta, el PPdeG semeja estar a resguardo del desgaste en el ejercicio del poder. Con el rastro aún fresco del huracán que dejó José María Aznar a su paso por las elecciones generales de marzo, el Barómetro de Verano de Sondaxe detecta un incremento de los populares gallegos en un 1,7% en intención de voto, respecto a los dos estudios demoscópicos realizados al inicio de la primavera y del invierno. El incremento del PP contrasta con la bajada de un 2,2% del BNG. La formación nacionalista rompe a la baja con la horquilla del 22% al 23% en la que se movió en los tres anteriores sondeos del Grupo Voz. En el tercer puesto Con las elecciones generales muy recientes y a un año de que Manuel Fraga intente por cuarta ocasión ganar el cetro de la Xunta de Galicia, populares y nacionalistas disfrutan de una elevada fidelidad de voto. La otra cara de la moneda es el PSdeG. La formación de Touriño _que en las elecciones municipales del 99 dio síntomas de recuperación entre el electorado_ no sólo se mantiene en un tercer lugar entre las preferencias de los gallegos, sino que además sufre de modo notable el trasvase de votos. De hecho, sólo un 52% de los electores que el 12 de marzo votaron a Almunia volverían a optar por la papeleta con el símbolo del puño y la rosa. La parte positiva para los socialistas es que se verían más favorecidos que el PPdeG por la fuga de electores del BNG.