Mordiscos de película
Galicia
Un coruñés le echa el diente al empleado de un videoclub donde acababa de robar seis DVD
14 Jun 2002. Actualizado a las 07:00 h.
A J. J., un coruñés de 32 años, debía de gustarle mucho el cine. Pero el pasado día 5 se equivocó de guión. Lejos de buscar una película y entrenerse con un pase privado, prefirió dar un giro a la historia y convertirse en protagonista de una cinta de cacos. Para dar el golpe -y no era ni Paul Newman ni Robert Redford, eso seguro- eligió un concurrido establecimiento del barrio del Agra del Orzán. Uno de los empleados del videoclub recuerda la escena con precisión casi milimétrica. «Era miércoles por la tarde. El chaval entró con absoluta normalidad, paseó entre los diferentes estantes y se fue metiendo en los bolsillos lo que pudo. Yo no le vi robar nada. Ni siquiera sospeché cuando abandonaba el local. Se iba con parsimonia, como si la cosa no fuera con él y, la verdad, había demasiados clientes como para fijarse en él», relata el dependiente. Claro que el sistema de seguridad del videoclub se demostró más que eficiente. El atronador «pi, pi, pi» del hilo metálico de protección atronó en toda la calle. El ladrón se dio a la fuga y tras él salió uno de los empleados del establecimiento. Pocos metros más adelante, le dio alcance al amigo de lo ajeno, pero en el rifirafe resultó lesionado de cierta consideración el leal trabajador a causa de un mordisco en el codo. Una vez zafado del placaje, el caco consiguió huir. Según consta en la denuncia, su botín fueron seis películas de DVD, valoradas por el propietario del local en 360 euros. Premonición ¿Los títulos? Pues no es que el ladrón, luego identificado por la policía como J. J. V. D., vaya a ganarse la vida como crítico cinéfilo. Se llevó, entre otros, Cocodrilo Dundee en Los Ángeles y Menudo bocazas. ¿Tendrían algo que ver ambas cintas con el posterior bocado propinado al dependiente que intentó evitar el delito? J. J. pasó ya a disposición judicial. Por lo visto, no era la primera vez que cometía fechorías. En su expediente ya había otras tres detenciones previas.