Protesta contra los recortes a ritmo de pasodoble en Fene

Al ritmo de salsa, rumba, pasodoble o cumbia. Con baile, karaoke, un bingo o juegos. Así de animado está siendo el encierro protesta de los usuarios del Centro Sociocomunitario de Fene, dirigido principalmente a la tercera edad, para pedir a la Consellería de Benestar e Traballo que no suprima el puesto de la asistente social. La protesta arrancó el pasado miércoles con el primer encierro de tres usuarios, que se vio truncado a media noche con la presencia de la Policía Autonómica. «Vinieron muy amables con una orden de la secretaria xeral de Política Social, Coro Piñeiro Vázquez, de que no podíamos permanecer toda la noche en el centro y teníamos que irnos sí o sí», relata Manuel Caldevilla, presidente de la coral del centro y uno de los impulsores de la protesta. A pesar del primer contratiempo, los mayores siguen con su particular iniciativa y ayer celebraron el primero de los bailes, en el que participaron alrededor de medio centenar de personas, para animar al resto de usuarios y vecinos. «Es que ahora somos nosotros los que asistimos a las actividades del centro, pero dentro de unos años serán otros que deben colaborar», pide Trinidad Fernández, hija del fundador del centro social en el año 1985.

Sobre la asistente, solo tienen piropos. «Nos ayuda con muchísimos temas», destaca Caldevilla. Desde la Consellería de Traballo e Benestar confirman que se la plaza será amortizada ya que se trata de un puesto de «personal laboral temporal». Según fuentes autonómicas, salvo dos o tres excepciones, ningún centro sociocomunitario tiene una asistente social salvo que cuenten con centro de día, y se creará otra plaza «donde sea más necesaria». Aún no hay una fecha oficial para hacer efectiva la supresión de la asistencia social, aunque los mayores piensan seguir hasta que el cuerpo aguante.