Aparece el coche robado a la mujer a la que intentaron secuestrar en Lugo

El coche de la mujer a la que intentaron raptar en la tarde del pasado sábado, en el aparcamiento del centro comercial de As Termas, apareció a primeras horas de la noche de ayer en las inmediaciones del colegio público de Albeiros, a un kilómetro aproximadamente de donde fue robado. El vehículo, un Opel Corsa de color gris, que estaba perfectamente aparcado, fue retirado por la grúa y trasladado a dependencias policiales para examinarlo en busca de pruebas para esclarecer este extraño suceso.

La víctima, que es una trabajadora del propio centro comercial, acudió a la comisaría de policía a presentar denuncia y a ofrecer su versión de lo ocurrido en la tarde del pasado sábado. La mujer iba a montar en el coche, que está a nombre de su padre, cuando fue abordada por los dos encapuchados, que la rodearon e intentaron introducirla a la fuerza en la parte trasera del vehículo.

La hipótesis del robo

La declaración, según fuentes consultadas, arroja algo de luz a este caso. De las líneas de investigación que sigue la Policía Nacional, la que parece con más visos de realidad es precisamente el robo del vehículo. Se especula con la posibilidad de que los asaltantes estuvieran buscando un coche para poder desplazarse y se fijaron en el de la mujer. La ocasión se les presentó cuando la vieron aparecer sola y abría la puerta.

Esta hipótesis, sin embargo, choca frontalmente con el intento de introducir a la víctima por la fuerza en el asiento trasero del vehículo, después de taparle la boca, a menos que la intención fuera dejarla libre poco después para que tardara algún tiempo más en dar aviso a las fuerzas de seguridad y así poder huir con mayor facilidad.

Resulta curioso que abandonaran el vehículo a un kilómetro aproximadamente del lugar en el que lo sustrajeron y que lo dejaran perfectamente aparcado. Podría ser que optaran por dejar el turismo al sospechar que la matrícula iba a ser difundida entre las fuerzas de seguridad, lo que dificultaría seguir circulando sin levantar sospechas.

Tanto la declaración de la mujer como las posibles pruebas que pueda encontrar la policía dentro del coche, permitirán avanzar en la identificación de los autores y aclarar un asunto que causó cierto desasosiego en la capital lucense. El hecho de que se tratara de un intento de secuestro, a plena luz del día y en el aparcamiento de un centro comercial lleno de gente, despertó todo tipo de especulaciones. Se produjo sobre las cinco de la tarde, en un día festivo en el que abrieron todas las tiendas.

En algunos círculos se llegó a especular con la posibilidad de que el intento de secuestro y el disparo que recibió en la noche del pasado jueves un extranjero, por parte de personas no identificadas, en la calle Benigno Rivera, pudieran estar relacionados. Ambos sucesos ocurrieron a menos de un kilómetro de distancia. Si se confirma la hipótesis del robo del coche como único móvil, parece descartado que ambos tengan algo que ver.