Galicia tendrá 5.500 hogares menos dentro de diez años

La crisis demográfica se lleva por delante otro indicador estadístico. Si las proyecciones de población del INE hechas públicas el pasado octubre auguraban un aumento del número de hogares durante los próximos tres quinquenios -pese al acusado descenso de habitantes-, ahora el Instituto Galego de Estatística echa por tierra esa previsión con un informe dado a conocer ayer en el que vaticina una caída de 5.548 (un 0,52 %) solo en el período 2014-2024, diez años en los que la población de la comunidad autónoma se desplomará, según los pronósticos a corto plazo, en 114.813 habitantes (pasará de 2.727.207 a 2.612.394).

Ni siquiera el aumento de los hogares formados por una sola persona o por una pareja -circunstancia que explicaba las previsiones que manejaba el Instituto Nacional de Estadística- servirá, según se desprende de los datos del IGE, para sostener este índice en el lado positivo. De hecho, el propio servicio estadístico gallego contempla un incremento de los hogares unipersonales y de los integrados por dos miembros durante el próximo decenio. Será, sin embargo, muy reducido: de un 0,13 % en el primer caso y de un 1,17 % en el segundo, que es el grupo más numeroso. Dentro de él, los formados por una pareja sin hijos registrarán un crecimiento que rondará el 1,2 %. Además, salvo en la provincia de Pontevedra, los hogares tendrán un mayor tamaño, ya que pasarán de una media de 2,6 miembros en la actualidad a 2,63 al final del período que abarca el estudio.

Mil al año a partir del 2020

La operación estadística Proxeccións de fogares muestra un tramo de seis años en el que las variaciones serán mínimas. Sitúa el punto de inflexión en el 2020, cuando la evolución demográfica precipitaría la desaparición de un millar de hogares al año.

En cuanto a la distribución geográfica, la provincia de Pontevedra aparece en las tablas como la única de las cuatro que, en sentido contrario a la tendencia general, experimentaría un aumento de este indicador (un 2,83 %). El saldo será negativo tanto en A Coruña (-0,35) como en Lugo (-4,2) y en Ourense (-6,29). El estudio divide el territorio gallego en 20 áreas. En la cola de este ránking se encuentran la que comprende las comarcas de O Carballiño y O Ribeiro (-13,79 %); la que integra las de A Limia, Baixa Limia, Terra de Celanova, Verín y Viana bajo el epígrafe Ourense sur (-13,44) y la denominada Lugo oriental, que abarca A Fonsagrada, Os Ancares y Sarria (-10,42). En el extremo opuesto, el positivo, estarían las áreas de influencia de Pontevedra, Santiago y Vigo, las tres por encima del 4 %.