Rueda ve urgente el traspaso de la AP-9 a la Xunta «para poder controlar a los nuevos dueños»
Galicia
Dice que la venta de la autopista a tres fondos extranjeros hace «más necesaria que nunca» la transferencia
30 Jul 2018. Actualizado a las 07:29 h.
La venta de Itínere a los tres fondos de pensiones extranjeros que controlan Globalvia, el gigante de las infraestructuras, está en el centro del debate político gallego ya que afecta principalmente a la gestión de la AP-9, la autopista que vertebra la comunidad de norte a sur. PSdeG, BNG y En Marea expresaron ya su malestar con la operación y la atribuyeron en buena parte a la última ampliación de la concesión de la AP-9 que el PP de Aznar otorgó a Audasa, nada menos que hasta el año 2048. Eso concede a los nuevos gestores de la autopista un plazo de treinta años de ingresos garantizados con el cobro de los peajes, teniendo en cuenta que el año pasado la AP-9 generó 140 millones de euros en peajes.
Tras las quejas de los grupos de la oposición, ahora es un miembro del Gobierno gallego, el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, el que muestra sus recelos con la operación al reclamar de nuevo que la titularidad de la autopista más importante de Galicia pase a la Xunta. Rueda considera que el traspaso de la AP-9 es «más necesaria que nunca para poder controlar a los nuevos dueños». Se refiere el vicepresidente a los tres fondos de pensiones que forman Globalvia y que son USS, de Canadá; OPTrust, de Holanda, y PGGM., del Reino Unido.
Globalvia opera en ocho países, España, Estados Unidos, Irlanda, Portugal, Andorra, México, Costa Rica y Chile, en los que gestiona en régimen de concesión 19 autopistas y 7 ferrocarriles. La adquisición de Itínere supone un desembolso de 723 millones, que es la cantidad en la que fue valorado el 55,6 % de las acciones que tenían Abanca, Kutxabank y Sacyr.
Rueda se refirió a los cambios en la AP-9 destacando que en todo caso se trata de un servicio público que se presta en Galicia y que hace necesario que su control se ejerza desde Galicia. «Sigue siendo un servicio público, el titular es la Administración y, por tanto, cuanto más cerca esté ese control de los nuevos dueños, creemos que es muchísimo mejor», dijo en la Ser. El número dos del Gobierno gallego apuntó que la venta a Globalvia hace más necesaria que nunca la transferencia a Galicia: «No queremos prejuzgar, no sabemos quiénes son exactamente, pero tener aquí la competencia para ejercer ese control se hace más necesario que nunca».