La prueba de ortografía desaparece de las oposiciones a Policía Nacional

Los futuros opositores a Policía Nacional están de enhorabuena. El Boletín Oficial del Estado (BOE) anunció este miércoles que se suprime la prueba de ortografía del proceso de selección. La decisión no es baladí, ya que esta parte de la oposición era una de las más duras para los aspirantes al cuerpo. Las quejas de los opositores, y también las de las propias academias, se repetían año tras año debido a su dificultad.

«No se trata de saber escribir, sino de memorizar el diccionario. No es una prueba muy justa porque no se está valorando al mejor perfil y hoy día, con tantas herramientas y diccionarios como hay, no tiene mucho sentido la forma en la que se plantea esa parte», explica uno de los formadores de la academia Nós Oposicións. La dificultad de la prueba está en que a los opositores se les presenta una lista de cien palabras y tienen que indicar si son correctas o incorrectas.

El problema está en que algunas de uso habitual no están recogidas en el diccionario y, por tanto, no son válidas a pesar de ser frecuentes en el día a día. «Con saber as regras de ortografía, como o uso do b e do v, non chega. As palabras teñen que aparecer no dicionario, pero algúns estranxeirismos, por exemplo, pode ser que aínda non estean admitido pola RAE», comenta uno de los preparadores de la academia Galopol, en Lugo. Las palabras con prefijos o sufijos que no figuran en el diccionario de la Academia son otro de ejemplo de los términos que tampoco son correctos. «Esto no va de haber con hache o sin hache», añaden desde Nós.

La dificultad de la prueba lastra a muchos de los opositores, que ven en la ortografía un problema para conseguir su plaza a pesar de llevar bien preparadas otras partes del temario, como la penal o administrativa, así como las pruebas físicas. Acertar o no las palabras solo es uno de los 44 temas de los que consta la oposición y prepararse para ello no tiene un método único. En algunos centros trabajan directamente sobre el diccionario a base de memorizarlo una y otra vez, mientras que en otros hacen hincapié en palabras raras o de reciente inclusión por la RAE.

Las pruebas de ortografía para el acceso a otros cuerpos, como la Guardia Civil, resultan más prácticas y menos memorísticas que las de la Policía Nacional. Una de las reivindicaciones de los formadores es que esta parte, que lógicamente consideran de importancia, se enfoque más a la colocación de la palabra adecuada en una frase y con un contexto, y no tanto al estudio de un listado de términos sobre los que tienen que contestar con premura. En ese sentido, los centros de preparación también destacan que el tiempo para contestar resulta escaso para tantas palabras.

Burlas sobre los aspirantes

La eliminación de la prueba ortográfica ha sido recibida con entusiasmo en las academias, si bien afectará a las siguientes convocatorias (la de este año fue el pasado 5 de febrero y las notas de corte saldrán el día 28). Y no solo facilitará el acceso, sino que también reducirá el estigma sobre los opositores. «Hay quien se burla de los que no pasan la prueba, pero hablamos de muchos opositores con carreras y el resto de pruebas aprobadas con buena nota», resume un formador.