Extorsionan a un amigo para que reparta la indemnización que recibió tras entrar en prisión por una violación que no cometió
Galicia
El afectado, un joven de Lugo, recibió 15.000 euros del Estado por el perjuicio que le causó la Justicia al enviarlo a la cárcel siendo inocente. Uno de los denunciados fue arrestado por la policía
03 Sep 2022. Actualizado a las 20:04 h.
Hay un conocido dicho que reza: «Con amigos así, ¿quién quiere enemigos?». Esta frase, tan popular en el refranero castellano, es el perfecto resumen del último capítulo de la historia de un joven lucense, que apenas roza la veintena, y cuyos dos últimos años de vida han sido de todo menos tranquilos.
El chico, vecino de la ciudad amurallada, fue arrestado por la Policía Nacional a principios del mes de enero del año 2021. El motivo fue la acusación que vertió sobre él una conocida suya, que lo identificó como el autor de la violenta violación que decía haber sufrido en la noche de Fin de Año.
El joven pasó dos meses y una semana en prisión provisional, acusado de un grave delito que no había cometido. Así se demostró meses después, cuando sus abogados consiguieron que el juez acreditase que la denuncia de la presunta víctima no se sostenía. La Justicia exculpó al joven de este delito y, además, apuntó a la denunciante, de 15 años en el momento de los hechos, como posible autora de un delito de denuncia y testimonio falsos que tampoco llegó a tener sentencia firme.
A pesar de que ese procedimiento quedó archivado, la mala fortuna no dejó en paz a este joven lucense. Meses después de que la Justicia acordase que fue encarcelado de manera errónea, el Estado lo indemnizó con 15.000 euros. Esta compensación se corresponde con el perjuicio que le supuso haber estado dos meses y una semana en prisión provisional sin un motivo de peso que justificase esa decisión.
Recibir este dinero, aunque suene ilógico, fue una pésima noticia para el chaval. Todavía no está muy claro cómo, pero dos amigos suyos se enteraron de que había sido indemnizado poco después de recibir el dinero. En lugar de alegrarse por él, como hubiera hecho cualquier amigo que se precie, estos dos jóvenes lucenses, de 22 y 21 años actualmente, trataron de extorsionar a su colega.
Lo hicieron a través de Instagram y Whatsapp. Los mensajes amenazantes se cuentan por decenas, al igual que las llamadas que hicieron a su teléfono en apenas unos días. Entre los comentarios que le dirigieron, destacan fuertes amenazas de muerte, amedrentamientos de «romperle las piernas» y demás improperios si no repartía la indemnización con ellos.
El afectado, al empezar a recibir estas amenazas, acudió a la comisaría provincial de la Policía Nacional de Lugo a denunciar. Poco después, los agentes dieron con los acusados. Uno de ellos, que contaba con antecedentes por malos tratos, robo con fuerza y amenazas, fue arrestado. Su colega solo fue identificado.
Le pedían 1.200 euros para cada uno a cambio de no cometer hechos violentos contra él. Solamente la acción de la policía pudo terminar con el reguero de amenazas que sufrió durante días.