Termina sin acuerdo la reunión para desconvocar la huelga de los letrados de Justicia

La reunión entre los máximos responsables del Ministerio de Justicia y los representantes de los letrados de la Administración de Justicia (LAJ) para desconvocar la huelga terminó sin acuerdo después de 15 horas sentados en una mesa. Sigue, por lo tanto, el paro.

Los letrados aseguran que han estado toda la noche «en una mesa frente a los representantes del Ministerio sin intercambiar palabra». Por su parte, el Ministerio de Justicia emitió un comunicado en el que indica que los representantes de los letrados abandonaron la mesa de negociación «tras haber elevado sus exigencias respecto a las inicialmente planteadas y sin ofrecer ninguna otra alternativa».

El secretario de Estado de Justicia, Tontxu Rodríguez, mostró su sopresa por la postura del comité de huelga, que calificó de «insólita y contraria la buena fe negociadora». Aseguró además que «cuando uno se sienta en una mesa de negociación debe partir de las demandas incialmente planteadas y estar dispuesto a hacer alguna concesión. Y la única propuesta hecha por los letrados de Justicia demuestra una clara falta de voluntad de alcanzar cualquer tipo de acuerdo».

Según denuncian los miembros del comité de huelga, Justicia no ha realizado «oferta concreta», más allá de «estudiar» los grupos de población que se utilizan para definir el complemento general del puesto y se ha limitado a solicitar «reiteradamente la desconvocatoria inmediata sin compromiso concreto alguno».

«Pero lo más desconcertante es que desde las doce de la noche se encuentran sentados en la mesa de negociación frente a frente sin entablar diálogo alguno», subrayan las asociaciones, que acusan al Ministerio, según recoge Efe, de actuar con «absoluta irresponsabilidad».

Posturas muy enfrentadas

La reunión, convocada por los responsables ministeriales, es la primera entre las partes desde que comenzó la huelga, el pasado 24 de enero. Las posturas están muy enfrentadas, en concreto en lo que se refiere a las subidas salariales que reclaman los letrados para adecuarlas a las competencias profesionales que han ido asumiendo en los últimos años. Ese distanciamiento en la negociación es lo que está provocando dificultades en la negociación. Desde que empezó la huelga, por parte del ministerio siempre se rechazaron las pretensiones de los LAJ alegando que ya habían tenido varias subidas de sueldo con el actual Gobierno de Pedro Sánchez. El secretario de Estado de Justicia y número dos del ministerio, Tontxu Rodríguez, llegó a decir que lo que piden los letrados es imposible de aceptar porque quieren cobrar como jueces o fiscales sin serlo. Ese distanciamiento previo no auguraba nada bueno y además, desde el ministerio, que convocó la reunión, seguían planteándose objeciones a los letrados solo horas antes de la cita.

A última hora de la noche trascendió que los dos representantes del ministerio que participan en la reunión (Tontxu Rodríguez y el secretario general, Manuel Olmedo) no habían accedido aún a las dos pretensiones de los huelguistas, según informa Europa Press. Se trata del establecimiento de una cláusula de enganche que equipare las retribuciones del sector a la de jueces y magistrados, y el fin de lo que este colectivo considera «discriminación salarial». El comité de huelga también pidió que en la negociación participen representantes del Ministerio de Hacienda y Función Pública, ya que ese organismo es el que tiene capacidad para decidir subidas salariales.

La ministra Pilar Llop dijo el miércoles en el Congreso que está «abierta a un diálogo honesto», aunque precisó que el de los letrados es «uno de los cuerpos que mayor subida retributiva ha tenido en esta legislatura». También los funcionarios en huelga expresaron su «predisposición para solucionar el conflicto» mediante la negociación de sus representantes en el comité de huelga, formado por letrados de Barcelona, Zaragoza, Sevilla, Valencia y Vigo.

Aunque los datos aportados por los convocantes y por el ministerio son muy dispares por la manera en la que los calculan, ambas partes coinciden en que el porcentaje que secunda la huelga se ha mantenido estable desde el 24 de enero. Los letrados estiman en 152.000 los juicios y otros procedimientos judiciales que se han suspendido a causa de la huelga y aseguran que la cuenta de consignaciones judiciales está parada y que hay 560 millones de euros pendientes de entregar en las cajas de los juzgados españoles.

Enganche salarial

Las principales reivindicaciones de los funcionarios son una cláusula de enganche a la ley de retribuciones de jueces y fiscales para no cobrar nunca menos del 85 % respecto a estos dos operadores jurídicos, siempre que tengan la misma antigüedad, y que su sueldo no sea menor en las poblaciones pequeñas. Ese enganche salarial es el gran escollo que tiene que salvarse en la negociación entre las partes.