El vandalismo grafitero en trenes costó 25 millones de euros a las arcas públicas el año pasado
Galicia
En Galicia hubo 79 actos vandálicos en el 2022, que supusieron un gasto directo de casi 265.000 euros
27 Feb 2023. Actualizado a las 12:33 h.
Casi 69.000 euros diarios de dinero público. Ese es, según Renfe, el coste de que ciertas personas o grupos se dediquen a hacer pintadas en trenes. La empresa cifra en 25,2 millones de euros el coste durante el año pasado de lo que denomina como vandalismo grafitero. Hay gastos directos, los de la limpieza de los vagones o máquinas pintarrajeadas, pero también se suman gastos indirectos, derivados, explican, de la inversión que deben hacer en seguridad, sumando personal, sistemas de videovigilancia o cuestiones como la futura implementación de drones.
Solo en Galicia, se registraron 79 actos de vandalismo grafitero contra trenes en el 2022, que generaron un coste directo de 265.000 euros. En concreto, los gamberros, para unos, artistas, para otros, pintaron en la comunidad 1.114 metros cuadrados de maquinaria.
Los efectos de este vandalismo van más allá de lo económico. La compañía explica que los usuarios también se ven afectados por cuestiones como retrasos o trenes suprimidos al pintarrajearse elementos de seguridad o de visibilidad que impiden que las máquinas circulen o frenazos de emergencia cuando la pintada trata de hacerse en medio de un trayecto, como ya ha pasado en Galicia. Sucedió, por ejemplo, en diciembre, cuando un grupo de jóvenes trató de frenar un convoy en la estación de Catoira para pintarlo, lo que derivó en una pequeña batalla campal entre ellos y el personal de seguridad.
Precisamente, el personal de Renfe abortó el año pasado 729 incursiones de grafiteros,y llegó a detener a 33. Las fuerzas de seguridad, además, pusieron a disposición judicial a un total de 150.
Esas gamberradas tampoco salen gratis a quienes las cometen, y son pillados. De hecho, hace poco más de un mes se celebró en Vigo un juicio contra una persona que pintó y firmó los vagones de un tren estacionado en la ciudad en el año 2017. Se le reclaman casi 11.000 euros en multas e indemnizaciones a Renfe.
Diez actos vandálicos al día
Según las cifras de Renfe, en el 2022 se denunciaron 3.559 intrusiones de grafiteros en sus instalaciones, lo que supone una media de casi diez actos vandálicos al día.
No todos tuvieron éxito, pero los que sí lo lograron, supusieron que los asaltantes cubrieran con sus espráis y pinturas cerca de 80.000 metros cuadrados, sumando las superficies vandalizadas de los trenes afectados en toda España. Para limpiarlas, hubo que emplear 10.500 horas de trabajo. Pero además, Renfe explica que movilizar esos convoyes hacia los centros de limpieza conllevó un consumo eléctrico equivalente al consumo de 44.000 hogares durante todo un día.
Calculan que para pintar toda esa maquinaria, los grafiteros emplearon unos 16.000 litros de pintura, de la que Renfe resalta que suele contener sustancias tóxicas como el benceno, con efectos nocivos sobre el medio ambiente y las personas. Vendría envasada en unos 40.000 botes, que también son residuos peligrosos contaminados, por lo que estos actos también suponen un problema ecológico.