Crimen de Muimenta: Ana Sandamil, condenada otra vez a prisión permanente revisable por asesinar a su hija Desirée
Galicia
La Audiencia Provincial de Lugo se suma a la postura del jurado popular y considera que la madre «no tenía afectadas sus facultades mentales». Es la segunda vez que la madre recibe este castigo, pero el TSXG anuló la primera sentencia por un error de forma
03 Apr 2023. Actualizado a las 12:51 h.
La Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a Ana Sandamil a prisión permanente revisable al considerarla autora del crimen de Muimenta. El tribunal le impone a la lucense el mayor castigo contemplado en el Código Penal español al considerar que asesinó a su hija Desirée Leal el 3 de mayo del año 2019. De esta forma, se posiciona junto al jurado popular y da por probado que la madre de la pequeña era consciente de lo que estaba haciendo al cometer el crimen.
Es la segunda vez que la Audiencia condena a Ana Sandamil con esta pena. La primera fue en febrero del 2022, después del primer juicio al que fue sometida por este crimen. Igual que ahora, el tribunal consideró que era totalmente imputable y que su situación psicológica, que presenta un trastorno psicótico y de personalidad, no es lo suficientemente grave como para eximirla del crimen.
Sin embargo, entonces, el tribunal y el jurado popular se limitaron a valorar el estado mental de la madre como «levemente afectado» y no «gravemente afectado» en el momento de los hechos. Este detalle fue clave para que se la condenase a prisión permanente revisable, ya que una afectación más grave podría haber supuesto una rebaja de pena o incluso un internamiento psiquiátrico y no en una prisión.
La sentencia
El documento emitido por la Audiencia Provincial de Lugo cuenta con 20 páginas. La sentencia se podría dividir en tres secciones. El objeto del veredicto del jurado popular y su razonamiento, los hechos probados e inamovibles, y la valoración de tribunal y jurado sobre lo visto en el juicio.
El primer asunto es especialmente importante, ya que la falta de razonamiento en el objeto del veredicto en el primer juicio fue lo que derivó en la anulación de la sentencia y en la repetición del proceso. En este caso, los jueces han querido ser certeros y, en varias ocasiones, han hecho hincapié en los motivos por los que el jurado popular decidió que la afectación mental de Ana Sandamil era leve y que, por lo tanto, era consciente de sus actos.
En la sentencia, el tribunal especifica que «el jurado expresó como análisis y motivo que le llevó a sus conclusiones» el argumentario que sirvió para «tener por probado el hecho fundamental, que [Ana Sandamil] dio muerte de manera querida y premeditada a su hija y, asimismo, lo que realmente fue el tema sustancial del debate, que la acusada no tenía afectadas sus facultades mentales».
La sentencia repite el razonamiento del jurado hasta la extenuación, incluso con fórmulas que evidencian que han querido evitar el mismo error que llevó a la repetición del juicio casi hasta de manera literal. «Del delito de asesinato es autora la acusada. [...] Ello es así, como ha puesto de manifiesto el jurado en su bien fundado veredicto, y la conclusión lo es como consecuencia de que efectivamente [Sandamil] planificó» lo sucedido aquella noche.
Finalmente, concluyen afirmando que «el jurado consideró que, en el momento de los hechos, ese trastorno no le impedía tener la plena capacidad para comprender y entender la ilicitud del acto aquí enjuiciado».
Los hechos probados
El tribunal de la Audiencia Provincial no se salió de lo esperado en su sentencia. De manera ordenada y cronológica, expusieron los hechos que consideran indubitados. Es decir: objetivos, que no se pueden discutir.
El resumen de esta sección se da en dos párrafos de la página 11: «En la madrugada del día 3 de mayo de 2019, la acusada, quien dormía en la misma cama con su hija, de 7 años, con la finalidad de acabar con su vida, le suministró un fármaco con efectos sedantes, trazodona, que disolvió en un líquido. Seguidamente, la asfixió con sus propias manos, ejerciendo presión en su cuello y obstruyendo también sus vías respiratorias, boca y nariz, para lo cual pudo haber empleado, además de sus manos, alguno de los objetos que había en la habitación (un cojín). [...] Luego de dar muerte a su hija, acudió al dormitorio de su madre para comunicarle que [Desirée] había muerto».
La valoración de los testimonios
En la última de las grandes secciones de la sentencia, el tribunal relata cómo valoró el jurado cada una de las pruebas y testimonios que presenciaron en el segundo juicio. Destacan, por ejemplo, que fue la madre la que buscó un veneno en Internet asociado con intoxicaciones en menores de edad, la estricnina. Además, valoran las palabras de las facultativas que estudiaron el cadáver de Desirée y definieron la causa de la muerte y descartaron el evenenamiento.
Para optar por el delito de asesinato y no el de homicidio, el tribunal explica que, «como bien indica el jurado, la madre era la garante de que a la niña no le ocurriera ningún mal y de que, al dormir ambas juntas, la niña se sintiera protegida de cualquier tipo de peligro que le pudiera ocurrir». Por ello, el tribunal emite esta sentencia aplicando un agravante de parentesco.
En el texto valoran los testimonios de algún guardia civil, entre los que destacan el que comentó que «le pareció que la madre estaba demasiado tranquila». Esta tranquilidad, según la sentencia, es un claro indicio de que su estado mental no estaba tan perjudicado. «En todo caso, los forenses son muy claros en que no existe relación entre la posible psicosis delirante y la muerte de la niña», concluyen.
Además de la prisión permanente revisable, la Audiencia de Lugo condena a Ana Sandamil a una pena de libertad vigilada durante los diez años posteriores a su posible salida de la cárcel, y a indemnizar con 250.000 euros a la familia paterna de Desirée Leal. La sentencia, al igual que la dictada en el primer juicio, es recurrible ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
El segundo juicio
Como el jurado y el tribunal solamente expusieron la elección y no razonaron el motivo de su decisión, el Tribunal Superior de Xustiza estimó el recurso de la defensa de Ana Sandamil y anuló la sentencia, obligando a repetir el juicio.
Por lo tanto, este mes de febrero, un año después, se volvió a juzgar a la madre de Desirée por los mismos hechos. En el proceso, Ana Sandamil nunca llegó a admitir su culpabilidad, pero llegó a afirmar que «jamás le haría eso a mi niña, al menos conscientemente», alegando que «era lo que más quería».
En los seis días que duró el segundo proceso (igual que el primero), la familia de Sandamil apoyó su versión, afirmando que tenía alucinaciones, que escuchaba voces y que «estaba muy rara» en las semanas previas al crimen. Sin embargo, la gran mayoría de los peritos y guardias civiles que comparecieron apoyaron la versión opuesta, afirmando que «sabía lo que hacía», que «su trastorno mental era leve y no estaba relacionado con el crimen» o que la habitación en la que murió Desirée «era claramente la escena de un crimen violento, no de una muerte accidental».
Este último detalle fue importante, ya que Sandamil, desde el primer momento, afirmó que la muerte de la niña pudo deberse a una intoxicación por trazodona (un potente somnífero), que la pequeña habría bebido de una botella que había en la habitación en la que durmió con su madre aquella noche y que Sandamil había preparado para quitarse la vida.
Ni la familia paterna de la víctima, ni los peritos ni los guardias civiles, ni el jurado popular ni, ahora, el tribunal se han creído esta versión. Y menos, cuando los forenses acreditaron en el juicio que la niña murió por asfixia por compresión, y no por una ingesta medicamentosa.
Así lo vio el jurado popular al encontrar culpable del crimen a la madre. En su veredicto, fueron claros. En base a la propia vista oral y al informe de los forenses, el jurado fue enunciando los motivos por los que consideró a Ana Sandamil culpable, a pesar de que reconoce que «padece un trastorno de la personalidad mixto que le influye a la hora de relacionarse y expresarse». Pero inmediatamente expone el veredicto que «en el momento de los hechos dicho trastorno no impide que Ana Sandamil, en pleno derecho de sus facultades, para comprender y entender la iniciativa del acto cometido».
Sandamil pidió perdón a la familia
Mientras el jurado iba emitiendo los diferentes argumentos que definían la culpabilidad de Ana Sandamil, el padre de la niña, José Manuel Leal, además de su madrina y su tío, comenzaron a llorar. Ya fuera de la audiencia, el padre seguía emocionado y a la vez aliviado: «Por fin se fixo Xustiza, dunha vez por todas, e polo menos ese monstro, esa asasina sexa apartada da sociedade».
El día anterior, la vista terminó con las palabras de Ana Sandamil, que cerró el juicio. En su turno final de palabra, la madre de la pequeña se levantó de su silla, echó una mirada corta al padre de Desirée, José Manuel Leal, y declaró ante los jueces y el jurado: «Quixen moito á miña filla, nunca quixen facerlle dano de forma consciente, non recordo nada dos feitos e non sei que puido pasar. Pido perdón á miña familia e á familia do seu pai polos danos causados. Padezo dunha enfermidade para sempre».
El tribunal de la Audiencia Provincial no lo ha visto así y, este viernes, emitieron la sentencia por la que condenan a prisión permanente revisable a Ana Sandamil. En España, más de una treintena de acusados fueron castigados con la pena máxima. En Galicia, Sandamil es la quinta.
3 de mayo del 2019: el crimen
El asesinato ocurrió en la casa familiar de Muimenta (Cospeito, Lugo) el 3 de mayo del 2019. La pequeña Desirée Leal, de siete años, durmió en la cama de su madre, pero nunca despertó. La Guardia Civil encontró el cuerpo sin vida por la mañana, después de que Sandamil avisase a su madre, la abuela de la niña, de que «morreu Desi», y esta llamase al 112.
El cuerpo de la pequeña presentaba signos de una muerte violenta por asfixia. Desde el primer momento, la Guardia Civil sospechó de la madre, que fue detenida unas semanas después, tras ser ingresada en el hospital después de haber intentado suicidarse ingiriendo unas pastillas tras el crimen.
Ana Sandamil ha sido juzgada en dos ocasiones por estos hechos. En ambas, condenada a prisión permanente revisable. La primera, ocurrió hace algo más de un año, cuando se la sometió al mismo proceso que ha pasado de nuevo hace unas semanas. Sin embargo, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia anuló la sentencia de la Audiencia de Lugo al considerar que el jurado que la declaró culpable no razonó de manera adecuada su decisión.
Según el TSXG, debieron haber justificado por qué valoraron la afectación psicológica de Sandamil como leve y no como grave, lo que es la clave del proceso.
EL OBJETO DEL VEREDICTO:
El jurado popular debió contestar a 20 preguntas propuestas por el tribunal para construir su veredicto. En estas cuestiones, los nueve miembros del jurado popular votaron qué opción les parecía más adecuada. Estas son las preguntas y los resultados:
1. La acusada Ana Sandamil mantuvo una relación sentimental con José Manuel Leal, fruto de la cual nació una hija llamada Desirée en el año 2011. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
2. En el año 2014 la pareja puso fin a su relación. La guarda y custodia se atribuyó a la madre, con la que convivía en un domicilio sito de Muimenta-Lugo; constituyéndose un régimen de visitas a favor del padre. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
Sólo se ha de aprobar la 3 o la 4.
3. La pequeña Desirée, de siete años de edad, falleció en la madrugada del día 3 de mayo de 2019, después de haber ingerido el líquido de una botella que su madre Ana Sandamil había preparado con intención de suicidarse para tomarlo ella misma, y sin que la madre tuviese ninguna intervención en la muerte de la niña. (Hecho favorable, requiere un mínimo de 5 votos).
4. En la madrugada del día 3 de mayo de 2019, la acusada Ana Sandamil, quien dormía en la misma cama con su hija de 7 años, con la finalidad de acabar con su vida, le suministró un fármaco con efectos sedantes, Trazodona, que disolvió en un líquido y seguidamente la asfixió con sus propias manos, ejerciendo presión en su cuello y obstruyendo también sus vías respiratorias, boca y nariz, para lo cual pudo haber empleado, además de sus manos, 7 alguno de los objetos que había en la habitación -un cojín-. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
5. Luego de la muerte a su hija, Ana Sandamil acudió al dormitorio de su madre María Novo para comunicarle que Desirée había muerto. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
6. Desirée falleció, siendo causa de la muerte asfixia mecánica por comprensión y oclusión de los orificios respiratorios. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
7. La niña no tuvo posibilidad de reaccionar o de defenderse, de que se produjera el ataque de su madre que le ocasionó la muerte. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
Sólo se puede dar por probada una de las dos, la 8 o la 9.
8. Ana Sandamil ingirió, en horas de esa mañana, unas pastillas de Trazadona, con la pretensión de acabar con su vida. (Hecho favorable, requiere un mínimo de 5 votos).
9. Ana Sandamil ingirió, en horas de esa mañana, unas pastillas de Trazadona, sabedora de que su ingesta no le provocaría su muerte. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
10. Días antes de estos hechos Ana Sandamil indagó en Internet sobre los medios con los cuáles podía acabar con la vida de su hija, realizando la búsqueda de un veneno llamado estricnina. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por mayoría (7-2)
11. Ana Sandamil era conocedora de la intención del padre de Desirée, José Manuel Leal, de modificar e incrementar legalmente el régimen de visitas, con el fin de que la niña y su padre pudiesen pasar más tiempo juntos. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo 7 votos). Probado por unanimidad
Sólo se puede declarar acreditada una de las cuatro: la 12, 13, 14 o 15.
12. Ana Sandamil tiene diagnosticado trastorno psicótico no especificado y/o trastorno de la personalidad de tipo mixto, y en el momento de los hechos tenía anuladas por completo sus facultades mentales intelectivas y/o volitivas y, por tanto, no tenía capacidad para comprender el hecho y su ilicitud y/o no tenía capacidad para actuar conforme a dicha comprensión. (Hecho favorable, requiere un mínimo de 5 votos).
13. Ana Sandamil , por razón de padecer un trastorno de la personalidad de tipo mixto y/o trastorno psicótico no especificado, al tiempo de los hechos presentaba una afectación severa o importante de sus facultades mentales, de modo que tenía severamente comprometida su capacidad para comprender el hecho y su ilicitud y/o también tenía severamente comprometida su capacidad para actuar conforme a dicha comprensión. (Hecho favorable, requiere un mínimo de 5 votos).
14. El citado trastorno que tenía Ana Sandamil afectaba parcialmente de forma leve a sus facultades mentales, y, por tanto, también levemente a su capacidad para comprender la ¡licitud del hecho y/o a su capacidad de autocontrol y para actuar conforme a dicha comprensión. (Hecho favorable, requiere un mínimo de 5 votos).
15. Ana Sandamil tenía algún tipo de trastorno, pero el mismo no afectaba a sus facultades mentales ni a sus capacidades cognitivas y/o volitivas que le pudieran afectar para comprender la ilicitud del hecho y/o a su capacidad de autocontrol y para actuar conforme a dicha comprensión. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por mayoría (7-2)
16. Ana Sandamil, como madre de Desirée, era persona que debía protegerla de cualquier mal. (Hecho desfavorable, requiere un mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
Sólo se puede dar por probada una de las dos, la 17 o la 18
17. Ana Sandamil ES CULPABLE de la muerte de su hija Desirée (Desfavorable, mínimo de 7 votos). Probado por unanimidad
18. Ana Sandamil ES NO CULPABLE de la muerte de su hija Desirée. (Favorable, requiere un mínimo de 5 votos).
En el supuesto de declarar la culpabilidad de Ana Sandamil , el Jurado se pronunciará sobre:
19. El Jurado es favorable (mínimo 5 votos) o no favorable (mínimo 7 votos) a que se pueda conceder un INDULTO por parte del Gobierno a la acusada por estos hechos. No favorable por unanimidad
20. El Jurado es favorable (mínimo 5 votos) o no favorable (mínimo 7 votos) a que se acuerde a favor de Ana Sandamil , siempre que concurran los requisitos legales, el mecanismo de la SUSPENSIÓN DE LA EJECUCIÓN DE LA PENA privativa de libertad que se le imponga. No favorable por unanimidad