El Gobierno, sobre la inminente llegada de 470 refugiados de Mali: «Galicia sempre foi solidaria»

La secretaria de Estado de Migraciones, la gallega Pilar Cancela, hizo ayer un llamamiento a la responsabilidad y a la solidaridad entre comunidades para la acogida de inmigrantes procedentes de Canarias, donde la presión migratoria está causando grandes problemas. Cancela señaló que este no es un tema del Estado, de las comunidades o de los ayuntamientos, ya que asegura que es una cuestión que se tiene que abordar entre todos: «Ou o asumimos desde unha perspectiva global ou non poderemos resolvelo».

La secretaria de Estado explicó que en este momento el sistema de acogida español da cobertura a 50.000 inmigrantes y recordó que España se ha convertido en un país de destino pues se considera que «é un país de oportunidades». En una entrevista en la Ser, Pilar Cancela dijo que en este momento los primeros lugares en número de inmigrantes que llegan a España son Mali y Senegal. Y subrayó que hay que dar necesariamente acogida a todas esas personas que llegan y que han pedido asilo o manifiestan su intención de pedir protección internacional. «É un dereito humanitario internacional, e o noso sistema ten que acollelos necesariamente». Cancela reconoce que hay que apostar por una inmigración regular, pero se preguntó «se iso é incompatible cunha inmigración de dereitos humanos».

Ante la avalancha de cayucos que están llegando a Canarias y al aumento de la inmigración procedente de África, pidió la solidaridad de las comunidades, porque si no será imposible gestionar el sistema de acogida. «Ou o facemos xuntos ou non seremos capaces de resolvelo», añadió.

Respecto a los 470 refugiados que huyen de la guerra de Mali y que está previsto que empiecen a llegar a Galicia a partir del próximo día 25 (los primeros se alojarán en el Monte do Gozo, en Santiago), la secretaria de Estado recordó que «Galicia sempre foi solidaria», y además quiso mostrar su satisfacción y la del ministerio por el acuerdo entre el Gobierno y la Xunta que puso fin a mediados de semana a la polémica por el número de refugiados que vendrían a la comunidad. También valoró positivamente que el Gobierno gallego facilitase la situación.

Respecto a los inmigrantes que llegan a Galicia y a otros puntos de España, la secretaria de Estado de Migraciones dijo que «é unha irresponsabilidade ligar aos migrantes coa delincuencia e a inseguridade. É un discurso de odio e racismo». Y aseguró: «Estas persoas non veñen quitarnos o traballo, senón que traballan nos sectores nos que nós non queremos traballar».