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La plantilla municipal de Ourense va hoy a la huelga por el hastío con Jácome

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Miguel Ascón Ourense / La Voz
Desde hace unas semanas, los trabajadores del Concello de Ourense celebran manifestaciones y concentraciones de protesta. Piden la dimisión de Jácome.

Denuncian la falta de negociación y los insultos del regidor a los funcionarios

31 Oct 2024. Actualizado a las 05:00 h.

Los trabajadores del Concello de Ourense están llamados hoy a secundar una huelga. Sus representantes llevaban semanas denunciando que el gobierno encabezado por Gonzalo Pérez Jácome no negocia con ellos asuntos clave, como la jornada laboral o el proceso de estabilización de empleo para interinos y temporales. A ello se une el hastío del personal por los frecuentes ataques del alcalde a los funcionarios, a quienes suele referirse como «vagos», «incompetentes» o «enchufados».

Una de sus últimas alusiones en ese tono fue cuando llamó «jetas» a los sindicatos por proponer como fechas para la huelga el 31 de octubre, víspera de festivo; y el 4 de noviembre, el siguiente lunes, permitiendo así que los trabajadores puedan hacer un puente de cinco días. También los acusó de pretender cerrar los cementerios en una jornada clave, hoy, cuando son muchos los ourensanos que visitan los camposantos para limpiar y preparar las tumbas de sus allegados justo antes de la celebración de Todos los Santos.

Desde el primer momento la junta de personal subrayó que precisamente esa no era su intención. «Nós vivimos en Ourense, temos familiares, achegados, e amigos nos camposantos e non os imos pechar», respondió su presidente, Javier Nóvoa, cuando compareció ante los medios de comunicación para anunciar los servicios mínimos negociados con el gobierno municipal.

Los trabajadores están de acuerdo con los servicios mínimos del 50 % decretados para los cementerios, pero no con ese mismo porcentaje para el servicio de Artes y Festejos. Ellos no lo consideran esencial, pero Jácome sí porque hoy mismo el Concello de Ourense tiene programadas múltiples actividades para celebrar Halloween y ese personal, según argumenta, es necesario para que estas puedan desarrollarse con normalidad.

La huelga se notará este jueves, sobre todo, en el registro municipal, que estará cerrado, aunque habrá un funcionario en servicios mínimos en la sede de la Praza de San Martiño para tramitar papeleos de empadronamientos urgentes. En el resto de departamentos con atención al público, repartidos por distintas dependencias, habrá un auxiliar administrativo.

Por otra parte, y tras la sugerencia de los propios trabajadores para garantizar la seguridad de la ciudad, en el parque de bomberos estará el 100 % del personal, es decir, once efectivos, en lugar de los ocho que proponía inicialmente el gobierno local. El ejecutivo tampoco propuso servicios mínimos en la Unidad de Conductas Adictivas, pero finalmente habrá un funcionario para asegurar la continuidad en el tratamiento de los drogodependientes que se benefician de esa prestación.

Los en torno a 700 trabajadores del Concello que no estén convocados a los servicios mínimos podrán ir efectivamente a la huelga. Como esta había sido convocada por la junta de personal, que representa a los funcionarios, el gobierno local argumentaba que el personal laboral no podría secundarla. Esa medida afectaba a un centenar de empleados, pero el alcalde de Democracia Ourensana se vio obligado a recular porque el comité de empresa que los representa manifestó por escrito su adhesión a los paros.

 

Concentración silenciosa

Coincidiendo con esta primera jornada de huelga, los trabajadores habían convocado una manifestación, pero decidieron suspenderla en la tarde de ayer en solidaridad con las víctimas de la dana en el Levante. En lugar de ello, se concentrarán de forma silenciosa a mediodía en la Praza Maior. Se mantiene, en todo caso, la huelga tanto para hoy como para el próximo lunes. Ese día sí habrá manifestación por las calles de Ourense.

Misma presencia de la Policía Nacional en Halloween, con la Local en mínimos

Según denuncian los sindicatos, el Concello de Ourense debe las horas extras realizadas por sus trabajadores en algunos casos desde hace casi año y medio. Como respuesta a esos impagos, los agentes de la Policía Local acordaron en asamblea no realizar más esos servicios, que son voluntarios. Esta situación ha tenido como consecuencia, por ejemplo, que por las noches ya no hay personal suficiente para organizar controles de alcohol y drogas. Además, según alerta el sindicato policial SPPME, hoy solo trabajarán ocho agentes y no 25 como ocurrió el año pasado.

Ante esta situación, el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, anunció en sus redes sociales que la Policía Nacional reforzaría su presencia para garantizar la seguridad en la celebración de las actividades programadas por el Concello con motivo del Halloween. Sin embargo, desde la Subdelegación del Gobierno explicaron que este refuerzo será el mismo que el del año pasado, como ocurre habitualmente con los eventos multitudinarios, y aclararon que el dispositivo no se ha diseñado para cubrir la falta de agentes locales. También subrayan que los efectivos de la Policía Nacional no realizarán trabajos relacionados con el control del tráfico, una tarea imprescindible por los cortes de calles por las actividades festivas.


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