Los extranjeros, segunda reválida pendiente
Grada de Río
17 Jun 2013. Actualizado a las 06:00 h.
El segundo reto de Miguel Torrecilla para su quinto curso es el mercado internacional. De todos los jugadores foráneos que han venido al Celta desde la llegada del director deportivo en el 2009 solo dos han repetido en dos temporadas: Fabián Orellana, aunque con un intervalo de seis meses de por medio, y Papadopoulos. A mayores, de los fichajes de extranjeros de la pasada campaña solo Krohn-Dehli y Augusto Fernández han respondido a las expectativas. Todos los demás han ido perdiendo un peso paulatino hasta desaparecer del mapa en las jornadas decisivas.
De los trece jugadores extranjeros contratados por el Celta desde la llegada de Miguel Torrecilla, el caso de Fabián Orellana es el que presente mayores diferencias. El jugador que llegó cedido en el último año de Segunda fue clave para el ascenso, pero el que arribó en propiedad en el pasado mercado invernal terminó siendo carne de banquillo y con un protagonismo reducido para su precio y para su rol. Park y Pranjic han sido los grandes fiascos, pero el chileno también tiene un sitio destacado en el mismo ránking.
En un escalafón intermedio podría quedar Gustavo Cabral, que ha mezclado claros y oscuros. Comenzó como jefe de la defensa, pasó al ostracismo y acabó cumpliendo en los partidos de la permanencia.
De los fichajes del pasado, al margen de los delanteros, apenas Botelho prometía, pero llegó a Vigo demasiado joven. Un caso parecido al de Diego Costa en los tiempos de Ramón Martínez.
Con estos precedentes y con un año más de contrato por delante, a Torrecilla le ha llegado el momento de acertar. Ya tiene otro año de experiencia.