La Voz de Galicia

Los días más difíciles de Vila

Grada de Río

Lorena García Calvo Vigo / La Voz

El central es el último defensor en la lista de Luis Enrique

14 Nov 2013. Actualizado a las 07:00 h.

No corren buenos tiempos para Jonathan Vila. El central de O Porriño se está encontrando numerosas piedras en el camino en una temporada que cada vez se le pone más cuesta arriba. En lo que va de Liga solo ha disputado un minuto, y por los movimientos de Luis Enrique, no parece que vaya a disponer de demasiadas oportunidades. El pasado sábado, cuando David Costas pidió el cambio por calambres, el entrenador, en vez de echar mano del de Budiño, prefirió a un defensa de 1,73 metros como es Jonny, a un central específico como es el porriñés. Ese ha sido el último eslabón de una cadena que incluye su habitual descarte en las convocatorias o el mayor protagonismo en el equipo de futbolistas que en teoría no contaban para el entrenador asturiano.

Y es que Vila ha visto cómo hasta el momento su trabajo no se ha traducido en minutos. Su primera convocatoria con el equipo llegó con la visita al Betis, y coincidiendo con la baja de Costas. Lleva un solo minuto disputado en competición oficial, y ha sido durante la temporada uno de los descartes recurrentes en las convocatorias de Luis Enrique. «Hay que ser comprensivos, no podemos jugar todos», comentaba a principios de octubre respecto a su falta de protagonismo.

En el mercado de verano Vila prefirió luchar por un puesto en el Celta en vez de negociar con el Zaragoza, que le había tanteado. Esa lucha, sin embargo, está siendo infructuosa. El curso pasado, cuando sobre el papel era el teórico tercer central del equipo, por detrás de Túñez y Cabral, a estas alturas había disputado 90 minutos, frente al Barcelona. Esta temporada se ha tenido que conformar con saborear unos segundos de Primera. Insuficientes para un jugador que parece ser la última opción de su técnico para el centro de la defensa, aunque el asturiano elogie su comportamiento ante los micrófonos.

Andreu Fontás se ha convertido en la pieza fija en la zaga céltica alrededor de la que están pivotando en los últimos partidos un Cabral que ha reencontrado el protagonismo, y un David Costas que acumula ya más de 700 minutos en Primera. «No creo que haya adelantado a nadie. Unas veces juego yo, otras juega Cabral, otra vez, otro», comentaba ayer sobre su protagonismo un Costas que cree que la participación de unos u otros «depende de las situación en la que estén los jugadores y las necesidades del equipo». Incluso Jon Aurtenetxe, aunque tiene un perfil más de lateral, ha tenido más protagonismo que el de O Porriño.

Los descartados, por delante

Luis Enrique nunca ha señalado públicamente a Vila como un jugador con el que no cuente. Sí lo había hecho en su momento con Túñez y Orellana. El primero optó por marcharse cedido y el segundo, contra pronóstico, se ha convertido en un cambio habitual en el once. Quizás esa posibilidad de revertir la situación es una de las cuestiones a las que se agarra Jonathan Vila, que dentro de dos meses tendrá en el banquillo un nuevo competidor, Samuel Llorca. O quizás también se agarra a su capacidad para sobrevivir y su paciencia. Esa que le valió disputar catorce partidos el año pasado.

Queda por ver, eso sí, si el futbolista de O Porriño se mantiene firme en su intento de luchar en el Celta o prefiere buscar nuevos rumbos en el mercado de invierno como ya hizo Túñez en Israel.


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