A evitar la peor racha a domicilio

Desde que volvió a Primera División en la temporada 12/13 el Celta solo encadenó en una ocasión nueve salidas consecutivas sin ganar fuera de Balaídos. Fue en la primera campaña y en una secuencia que comenzó Paco Herrera y finalizó Abel Resino. Desde entonces la vez que más cerca estuvo de repetirlo fue en la segunda vuelta de la campaña pasada, cuando los de Unzué cerraron ciclo con ocho visitas en Barbecho. Y a ocho ha llegado de nuevo esta campaña el conjunto vigués, que solo ha sido capaz de sumar dos puntos en forma de empate de los últimos 24 en disputa a domicilio. Con esa espada de Damocles encima visita mañana en el Wanda Metropolitano a un Atlético casi infalible como local con el riesgo de igualar el peor registro de la década.

Para encontrar la peor racha de la última época hay que viajar hasta el 9 de diciembre del 2012 cuando el Celta había caído en San Mamés por un solitario gol. A continuación llegarían las derrotas ante Athletic, Atlético, Espanyol, Osasuna, Getafe, Sevilla, Deportivo y Mallorca y el empate en Málaga (1-1). En total un punto sobre 27 posibles.

Esa situación no volvió a repetirse desde entonces. La vez que más cerca estuvo fue en la insulsa segunda vuelta de la temporada pasada cuando los vigueses ganaron en Anoeta en la primera jornada tras el ecuador y a continuación despidieron la liga con una secuencia de ocho salidas sin ganar. De esos 24 puntos posibles el equipo de Unzué sumó uno, en el empate de San Mamés con gol de Brais. En total cuatro meses redondos sin traer una victoria a casa.

La historia se repite ahora en una temporada convertida en pesadilla. Los célticos mantuvieron el tipo a domicilio en la primera vuelta, aunque dentro de un perfil bajo, con ocho puntos en nueve salidas, con empates en Mestalla y en el Benito Villamarín y con victorias en el Ciutat de Valencia y el estadio de la Cerámica. Fue en Villarreal la última vez que los vigueses ganaron a domicilio y desde entonces han pasado ocho partidos con un bagaje de seis derrotas (Barcelona, Rayo, Valladolid, Getafe, Eibar y Real Madrid) y dos empates (Alavés y Huesca). Dos puntos de 24.

A nivel histórico la peor racha del Celta se encuentra entre los años 1971 y 1978 cuando estuvo siete años sin ganar un partido a domicilio, jugando durante este trecho cuatro temporadas en Primera. Esta misma racha incluye otra que va desde 1969 a 1981 cuando el equipo solo había ganado siete partidos en ocho campos diferentes de la máxima categoría.