La peligrosa herencia del pasado
Grada de Río
El Celta inicia la liga sin corregir sus facilidades defensivas y la falta de equilibrio en las bandas
19 Aug 2019. Actualizado a las 05:00 h.
Los goles encajados y las ocasiones concedidas son por el momento la herencia del pasado de la que todavía no se ha despojado el Celta, pero no la única. Los celestes necesitan un juego equilibrado por bandas (solo existió la izquierda) y la ausencia de Santi Mina le privó de la opción de poder correr, un plan B que le ha dado resultado cada vez que lo ha puesto en práctica.
DEFENSA
Demasiadas concesiones al Madrid, 11 tiros
El Real Madrid tiró 11 veces entre los tres palos en Balaídos. No es esa la mejor noticia para un equipo que quiere crecer desde la defensa y que se ha puesto como reto rebajar de un modo considerable los 62 encajados la temporada pasada (1,5 por partido). De momento llevan tres en contra. Curiosamente el Real Madrid no hizo ninguno por su costado derecho, todos llegaron por el centro y en la izquierda. Como la temporada pasada se echó de menos un punto más de contundencia.
ATAQUE
Déficit de ocasiones reales para el equipo vigués
Aunque mermado por la ausencia de Santi Mina y teniendo en cuenta que enfrente estaba el Real Madrid, la producción ofensiva del Celta estuvo por debajo de su media histórica de los últimos tiempos. Los célticos solo pusieron a prueba a Courtois en cuatro ocasiones. Aspas en un mano a mano y Araujo con su cabezazo protagonizaron los dos lances más comprometidos para el portero belga.
UNA BANDA
La izquierda monopolizó el juego de ataque
Casi todo lo que generó el Celta en ataque fue por el costado de Olaza y Denis. Hasta un 39 % del juego fue por ese lado, siete puntos más que el derecho. No obstante, y curiosamente, los dos costados igualaron a un 14 % a la hora de mirar portería, porque la finalización en el Celta se circunscribe en un 71 % al pasillo central. Más allá de los números el primer partido evidenció que el cuadro vigués necesita profundidad en las bandas y futbolistas que jueguen al espacio.
CARENCIA
Sin opción de correr
La única manera que tiene el Celta con la plantilla actual de activar un plan B y poder jugar al contragolpe es con Santi Mina en el campo y por el momento el vigués está lesionado y con toda probabilidad no volverá hasta después del parón. Los celestes solo pudieron salir a la contra en dos ocasiones ante un Madrid que nunca adelantó la línea defensiva. En una de esas dos salidas le fue señalado un fuera de juego a Aspas cuando menos riguroso. Al moañés le sancionaron cuatro.
FINALIZACIÓN
Falta tiro desde fuera del área
Por tradición y por perfil de jugadores no es el Celta un equipo que se prodigue en el disparo desde fuera del área y ante el Real Madrid se repitió la historia. Del juego de ataque generado los de Escribá acabaron el 57 % de las jugadas dentro del área grande y solo el 29 por fuera. Los blancos, véase el tanto de Kroos, todo lo contrario.
BALÓN
La posesión sigue siendo patrimonio celeste
El Celta quiere tener el balón también esta temporada. La posesión registró un 56,6% del esférico ante los de Zidane, con 462 pases buenos de 521 en total, pero a este dominio le faltó profundidad y un cambio de ritmo en muchos momentos del partido. Quien más aceleró con el balón en sus pies fue Denis Suárez.
LOS NUEVOS
Puesta a punto pendiente para el Toro Fernández
Solo dos de los jugadores fichados este verano por el Celta formaron parte del once inicial. Denis firmó un excelente partido y Gabriel Fernández necesita una puesta a punto a la carrera. El uruguayo tendrá una nueva oportunidad ante el Valencia en donde podría protagonizar un duelo con Maxi Gómez. Aidoo y Jorge Sáenz, los dos nuevos centrales, se quedaron sin jugar.