«Non haberá expropiación forzosa, buscamos o consenso»

La alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, explicó ayer los motivos de la suspensión del acto que iba a haberse celebrado la víspera con los vecinos del municipio para hablar sobre el proyecto del Celta en Mos. La regidora comenzó con la lectura de un comunicado de condena a la violencia que motivó la cancelación y después detalló su postura sobre la ciudad deportiva y el centro comercial, además de responder a los argumentos de quienes lo rechazan.

Sobre el hecho de que la reunión no pudiera celebrarse, desde el Concello se atribuye a «40 exaltados, algúns nin sequera censados en Mos», que se negaron a identificarse a petición de la policía, lo que dio lugar a forcejeos y a que varias personas resultaran heridas. Una de ellas pasó la noche hospitalizada en observación. Ante estos hechos, desde el gobierno municipal manifestaron su «repulsa e condena», señalando que su única pretensión era desarrollar un «acto democrático» con la ciudadanía.

A continuación, la regidora recalcó su convicción de que están ante «a gran oportunidade de Mos» con una superficie comercial de 120.000 metros, deportiva de 250.000 y una zona verde reforestada de 450.000, desgranó. A esto se sumaría «un vial que conectará Mos co Álvaro Cunqueiro, a Universidade e a cidade». Incidió en que la creación de puestos de trabajo será de 2.000 y la inversión, de 200 millones, con un ICIO de siete e IBI de más de uno.

Arévalo argumenta que defendiendo este proyecto está «cumprindo co único obxectivo de calquera alcalde que teña a cabeza no sitio e os pés no chan, que é defender os intereses do seu municipio». Recordó, asimismo, que se sometió a unas elecciones de las que salió vencedora con este proyecto ya encima de la mesa. «Mantívenme firme e dixen: ‘Se me teño que ir para casa, voume, pero co a conciencia tranquila de que fixen o que me corresponde e para o que o pobo me puxo’». Por el mismo motivo, añadió, convocó a los vecinos a la reunión suspendida. «Fíxeno pola transparencia e o consenso, para tender a man. Todos se preguntan por que esa reunión se teño maioría absoluta. Foi para cumprir coa miña palabra e porque non teño nada que ocultar».

Acusó directamente de la protesta a «Antonio Cajide, Gonzalo Pérez, o señor Roca, o señor Román, os mesmos que pretenderon tumbar as eleccións e están imputados». También deslizó que convocó a 3.500 personas y acudieron «200 en son de paz e 40 a montar follón. Se o resto non acode é que o ten clarísimo». Insiste en que siempre dijo y mantiene que no habrá expropiación forzosa. «Buscamos consenso, teño antecedentes diso con Pereiras, onde hai un acordo cun abanico de entre doce e 18 euros por metro». Asegura que se quiere comprar a los particulares 400.000 metros, entregarlos a la comunidad de montes y reforestar con dos millones de euros que se les darán a ellos, sostiene.

La regidora se refirió a su homólogo de Vigo. «Di que isto atenta contra o comercio de Vigo. E que pasa con Mos? Temos que ser durante toda a nosa historia o concello autovía, o concello aeroporto e a alfrombra de Vigo? Non, señor Caballero», espetó. Además, aseguró tener pruebas de que Caballero «pretende poñer no límite con Tameiga un polígono de residuos da construción». Considera «lamentable que o PSOE de Mos defenda ao alcalde de Vigo en vez de aos veciños de Mos».