El Concello de Mos se compromete a no expropiar los terrenos para el Celta
Grada de Río
La alcaldesa Nidia Arévalo no atendió la petición del PSOE de retirar la palabra «expropiación», única forma que aparece en la documentación de la modificación puntual del Plan Xeral aprobada en el pleno
01 Oct 2019. Actualizado a las 05:00 h.
No habrá expropiaciones, sino negociaciones para llegar a un acuerdo al precio de 12 euros el metro cuadrado de terreno. Este es el compromiso dado por Nidia Arévalo, la alcaldesa de Mos, en el pleno con carácter monográfico que se encargó de aprobar con la mayoría del Partido Popular la modificación puntual del PXOM de Mos (con nueve votos a favor y ocho en contra), clave para que la ciudad deportiva y el centro comercial del proyecto del Celta sea legal.
El PSOE, por medio de su portavoz Victoria Alonso, solicitó en dos ocasiones durante el pleno que se retirase la palabra expropiación del documento, algo que no logró, aduciendo la grupo de gobierno que la «expropiación directa» es el único encaje legal en la redacción del proyecto pero, según Arévalo, no significa que se vaya a poner en práctica. La alcaldesa aprovechó el pleno para atacar a los tres grupos políticos de la oposición. Tildó de «marioneta de Abel Caballero (a quien envió un par de recados)» a la portavoz socialista y a GañaMos de «brazo armado da Comunidade de Montes». Todo en una concurrida y tensa sesión que se extendió por espacio de dos horas y media.
«Non se van a expropiar (los montes), haberá acordo. Quero aprobar isto, pero será co consenso, coa man tendida e chegando a acordos cos propietarios, pero o non polo non tampouco vale», comentó la alcaldesa, que quiso poner de ejemplo las negociaciones con la parroquia de Pereiras «onde se negociou a 18 e 12 euros». Será este último precio el que ofrezca el Celta en la negociación, según desveló el propio club y corroboró la alcaldesa. Los 1,5 euros metro cuadrado que aparecen en el expediente serán destinados, según la alcaldesa, a indemnizaciones eventuales.
El BNG, por mediación de su concejal Gustavo Barcia, preguntó por qué en el expediente de la modificación puntual del PXOM solo se contemplaba la fórmula de la «expropiación directa» y no aparecía ni la permuta, la compra ni la negociación, explicando Arévalo que técnicamente no era posible «pero confío en que haxa acordo con todo o mundo». «¿E se non o hai?», le espetó el portavoz nacionalista, sin que la alcaldesa se inmutase: «Confío en que o haxa», volvió a repetir. Una idea que en absoluto convence a GañaMos «porque o único que se apunta é o sistema directo de expropiación e iso é o que vale. A súa palabra de que non vai a expropiar non vale nada», comentó Román González, su portavoz, que también espetó que «a maiores dos veciños non queren este esperpento nos nosos montes».
Porque uno de los problemas que pudiera encontrar la negociación sería la negativa de la Comunidad de Montes de Tameiga a vender, un escenario que parece no contemplar Nidia Arévalo, que sostiene que quieren hacer una permuta de dos por uno con Tameiga, de ahí que como paso previo se negocie con particulares para luego entregarle los metros necesarios a los comuneros.
«Vanse transformar 255.000 metros cadrados de monte en dotacional deportivo, 160.000 en tecido comercial e 457.000 en zona verde. De Pereiras necesítanse 150.000 metros, de Tameiga 180.000 e 456.000 de particulares, que se compran para entregar a comunidade de montes nesa permuta de dous por un», explicó Nidia Arévalo.
La alcaldesa garantizó que una vez realizados todos los trámites se convocará un proceso de concesión pública en igualdad de condiciones «no que poderán concurrir o Celta, o Real Madrid, o Coruxo e todo aquel que cumpla as condicións».
Al margen del sistema de adquisición de los terrenos que necesita el Celta para su centro comercial y la ciudad deportiva, la oposición se preguntó porque antes de dar el paso no se consultó con los propietarios de los terrenos para saber si estaban a favor de la iniciativa o no. «Presentouse o proxecto sen contar cos veciños».
El PSOE preguntó al secretario si el pleno sería válido sin un informe del Ministerio de Fomento, documento que le fue requerido diez días antes del pleno. El funcionario informó en sentido afirmativo y Nidia Arévalo apostilló que «vostede (por Victoria Alonso) e o señor de Vigo (por Abel Caballero) vanse encargar que os problemas veñan dende o Ministerio de Fomento».