Beauvue sufre su segunda lesión grave como jugador del Celta
Grada de Río
El antillano sufre una rotura de menisco de rodilla y pasará por el quirófano
26 Oct 2019. Actualizado a las 05:00 h.
Claudio Beauvue es el jugador de la eterna sonrisa, pero la suerte no le ha sonreído desde que desembarcó en el Celta en enero de 2016. Poco después de llegar se rompió el tendón de Aquiles, una lesión que le tuvo casi un año parado y de la que nunca volvió en plenitud, luego comenzaron las cesiones, este verano el club le comunicó que no contaba con él y como declinó salir, los entrenamientos eran su único norte, y en uno de ellos sufrió una rotura en el menisco de la rodilla izquierda de la que ayer informaron los servicios médicos y que le llevará a pasar por el quirófano.
«Beauvue sufre una rotura en el menisco y será intervenido en los próximos días. ¡Mucho ánimo, Claudio!», fue el mensaje del Celta en la mañana de ayer. El jugador antillano ya había trabajado con el recuperador en alguna sesión de esta semana a la espera de la confirmación de un diagnóstico que finalmente le obliga a pasar por el quirófano.
La lesión corta de raíz cualquier posibilidad de que el futbolista pudiese cambiar de aires en el mercado invernal ya fuera como cedido o libre. Al antillano le queda año y medio de contrato en Vigo, hasta el 30 de junio del año 2021.
Beauvue fue una fuerte apuesta de invierno en la temporada 15/16. Claudio tuvo minutos de inicio, aunque sin asentarse en el once, y en el mes de abril (tres después de llegar) sufrió una rotura en el talón de Aquiles que le tuvo sin jugar durante diez meses. Reapareció en febrero del 2017 en el Molinón, en la temporada de la semifinal de Europa League, y tuvo cierto protagonismo en el último trimestre con goles importantes como el marcado ante el Krasnodar en los octavos de la competición continental. Sin embargo, para entonces había perdido parte de su fortaleza física, un aspecto fundamental para su rendimiento.
En el verano de aquel 2017 comenzaron las cesiones, un año en el Leganés y otro en el Caen francés. En ninguno de los dos destinos las cosas le fueron bien al antillano, que este verano tenía en mente rescindir con el Celta para buscarse un acomodo balompédico. Pero no hubo acuerdo ni ofertas y pese a que el club le hizo saber que no contaba con él, terminó quedándose en Vigo aunque solo para entrenar.
Y después de tres meses de trabajo en A Madroa, al antillano le llega un nuevo revés vestido de celeste, en este caso una operación de menisco que le puede apartar durante un tiempo prudencial de la práctica deportiva.
A efectos deportivos para el Celta no supone ningún contratiempo porque ya no contaba con el jugador, pero sí a efectos de confección de plantilla provoca que el club no pueda liberar una ficha y librarse de una cantidad importante en el tope salarial para poder acometer algún movimiento en el mercado de invierno si la dirección deportiva así lo estima oportuno.
A Beauvue le queda esta temporada y otra más de contrato con el Celta, al que llegó con 27 años y con el que firmó por cinco temporadas y media por más de cinco millones de euros.
Rafinha entra en el parte por una gastroenteritis y Hugo Mallo entrenó con normalidad
Rafinha Alcantará entró en la jornada de ayer en el parte médico del Celta por una gastroenteritis y Hugo Mallo entrenó con normalidad y parece estar a punto de recibir el alta.
Rafinha, que ya había entrenador al margen los dos días anteriores aparece desde ayer en el parte con una gastroenteritis. No es, por tanto, la causa de que ya hubiera trabajado en el gimnasio y no hubiera participado de las sesiones grupales el miércoles y jueves. El hispanobrasileño guardó ayer reposo domiciliario por prescripción médica.
Además, Hugo Mallo se acerca al alta y apunta al partido del domingo frente a la Real después de haber completado con normalidad el entrenamiento. El defensa lleva arrastrando una contractura en los isquiotibiales del muslo derecho que le obligó a retirarse en Mendizorroza.