Del peor al mejor momento de Denis Suárez en 45 minutos
Grada de Río
El salcedense, que encadenaba dos suplencias por primera vez con el Chacho en el curso de su conflicto con en Celta, marcó su primer gol en más de dos años
29 Sep 2021. Actualizado a las 05:00 h.
La noche del lunes no pintaba del todo bien ni para el Celta ni para Denis Suárez. Para el equipo, por el desarrollo del partido, y para el salcedense, desde antes. Porque por primera vez con Eduardo Coudet, el canterano encadenaba dos suplencias seguidas. Una situación que llegaba en la temporada que comenzó con un conflicto entre el jugador y el club que, que haya trascendido públicamente -como se conoció el problema de boca de Carlos Mouriño-, no se ha solucionado. Sin embargo, de sus botas nació el gol de un triunfo clave. Y con su primer tanto en Balaídos.
El anterior gol de Denis databa del 30 de agosto del 2019, en la tercera jornada de Liga frente al Sevilla en el Sánchez Pizjuán. También fue un tanto postrero, aunque no tanto como el del lunes -aquel, en el 83-, y sirvió para salvar un empate aún con Fran Escribá al frente del equipo. Desde entonces, y aunque el curso pasado dio nueve asistencias de gol -y en el anterior, cinco-, no había visto portería y lo tenía como una asignatura pendiente que se le resistía. Hace unas semanas, en una charla con Miguel Lago, comentaba: «Soy el encargado de dar salida al balón y enlazar con Iago, Brais y demás y con cuatro jugadores por delante, no llego tanto».
Momento delicado
Este premio para el jugador llega en un momento delicado para él. Indiscutible desde la llegada de Coudet, nunca hasta la jornada anterior había partido en el banquillo con el actual entrenador del Celta. Le tocó seguir como espectador los primeros 45 minutos del duelo frente al Levante y, de nuevo, la primera mitad del compromiso frente al Granada. Porque en ambos casos el Chacho le dio entrada ya tras el descanso.
También llega en una etapa compleja de su relación con el club. Fue el propio Mouriño el encargado de hacer público que le había instado a buscar equipo después de acusarle de deslealtad. El problema vino por tener Denis un estrecho vínculo con Intermedia Sports Player, su agencia de representación y a la que el presidente acusó de «subastar niños» por el caso de Bryan Bugarín, el canterano que fichó por el Real Madrid tras destacar en La Liga Promises.
El propio Denis aseguró que tuvo opciones de salir después de que el desencuentro se hiciera público, pero que le dio su palabra al Chacho de que continuaría en el Celta y nunca se planteó otra posibilidad. Con un año más de contrato por delante, y señalando Mouriño que nunca se sentará con Intermedia a negociar su renovación, le aconsejó hacer una buena temporada para tener opciones apetecibles de marcharse el próximo verano. Hasta el momento, no lo estaba siendo, pero este tanto puede marcar un punto de inflexión, al menos a nivel de confianza y con muchas jornada por delante.
La broma con Coudet
Incluso Coudet había revelado tras el anuncio de su renovación que tenía una broma interna con Denis sobre este tema. El canterano participó en la iniciativa de enviar preguntas al técnico: «Dile que llevo todo el verano haciendo celebraciones delante del espejo y ya me dices qué contesta», le leían al Chacho. Y este respondía: «Le dije que empiece a practicar los festejos porque que para mí no ha hecho goles porque no tiene festejos, que practique. Creo que ha cerrado una muy buena temporada, pero en esta exigencia que tenemos, debe goles. Así que se los pido constantemente».
Ya el lunes el técnico expresaba que se sentía contento por Denis, pero que no había tenido ocasión de ver su celebración. «No vi el festejo porque festejé yo. No sé si lo tenía preparado», comentó recordando que es una broma entre ellos. Ya en serio, dijo que el salcedense «viene trabajando bien» pese a que lleva dos partidos sin salir de inicio. «Tratamos de generar competencia interna, elevar los niveles individuales a la máxima expresión. Creía que por la circulación tenía que entrar Denis», si bien resaltó que Beltrán -que dejó su sitio al canterano- también estaba haciendo un buen partido.