Gabri Veiga: «El Celta es el club de mi vida, en el que quiero estar muchos años»

Gabriel Veiga Novas (O Porriño, 2002) es una de las perlas de la cantera del Celta. Gabri, estudiante de Periodismo y que comenzó en el fútbol dándole patadas a una calabaza, ya debutó en Primera División de la mano de Óscar García y este curso fue titular en Copa con Coudet, aunque su hábitat natural está siendo el filial, en donde a diferencia del curso pasado, es un jugador fundamental. En la actualidad, se encuentra negociando su renovación, lo llevan sus agentes de confianza, y que espera que lleguen a buen puerto muy pronto. Su único deseo es estar en el Celta muchos años y el próximo curso, si es necesario, no le importaría repetir en el filial.

—¿Qué balance hace de lo que va de temporada?

—A nivel personal, es una temporada que me está sirviendo para crecer como futbolista, tanto por los entrenamientos con el primer equipo como en el filial. Creo que ahora soy mejor futbolista de lo que empecé la temporada y ese es el objetivo que me marqué. A nivel colectivo, no tuvimos un inicio idílico, pero supimos reponernos, estamos sabiendo agrandar nuestras virtudes y creo que estamos formando un gran grupo.

—Un cambio importante para usted con respecto al año pasado, cuando entrenaba con el primer equipo y luego bajaba y no jugaba con el filial.

—Por esa parte, estoy muy contento. Hay que agradecerle al entrenador la confianza porque no es fácil si no estás durante las semana, pero ante el Sanse salió bien y ojalá salga así siempre.

—¿Qué se le venía a la cabeza cuando no jugaba ni en el primer ni en el segundo equipo?

—Que son situaciones que un futbolista tiene que pasar. De ellas aprendí mucho, siempre tuve el máximo respeto por los compañeros que jugaban y yo trataba de hacerle ver al míster que yo también podía participar. Él tomaba sus decisiones y yo lo respeté y seguí sumando como uno más. La actitud y el respeto siempre tienen que estar ahí.

—¿Ahora está con más confianza?

—A medida que vas sumando minutos, es un plus de confianza, tanto arriba como abajo. A todo futbolista le encanta jugar, hacerlo en el primer equipo es un sueño para todos y cada minuto es la leche, mientras abajo es un aprendizaje constante. Nos estamos adaptando muy bien a la categoría y tenemos muchas ganas de seguir sumando retos.

—¿El año que viene se ve en el primer equipo?

—Yo lo que me veo es cumpliendo etapas en el filial y cuando se me necesite arriba, estaré encantado de participar. Tengo que seguir con esta progresión, dando pasos, y ya se verá.

—Entonces no tendría ningún problema en seguir en el B.

—Yo no he sido de problemas nunca. Si fuese arriba, es el sueño de todo canterano, pero si es en el filial, también está muy bien. Es una categoría muy difícil y semiprofesional casi, y que también me ayuda para aprender mucho y para estar más preparado en la élite.

—¿Cómo está el tema de su renovación?

—Están mis agentes negociando con el club y espero y deseo que se llegue a buen puerto pronto. Ya he dicho que el Celta es mi casa, es el club de mi vida y es el sitio en el que quiero estar muchos años disfrutando juntos.

—¿Le gustaría ser un futbolista de un solo club como puede serlo Hugo Mallo?

—Eso son palabras mayores. Hugo siempre nos ayuda mucho y la verdad es que le tengo mucho cariño. Es un gran ejemplo, igual que Aspas o Brais, ojalá pueda ser como ellos.

—¿Cómo está el tema de su agencia de representación?

—Mis personas de confianza están trabajando en otra empresa y el tema con mis agentes creo que está solucionado y están hablando de mi renovación con normalidad.

—¿Cómo fueron sus inicios en el mundo del fútbol?

—Cuando era muy pequeño, en casa de mis tíos, me causó curiosidad una calabaza, empecé a darle patadas y desde ahí me entraron los balones por la cabeza. Comencé en el Louro Tameiga, a los cuatro años, y luego al Santa Mariña en donde estuve hasta alevín, y ahora llevo ocho en el Celta, al que considero el club de mi vida.

—En los últimos años ha dado un buen estirón a nivel futbolístico.

—Creo que desde la temporada con los hermanos Montes. Yo era del juvenil B y me llamaron para hacer la pretemporada con el Celta B, lo que me sorprendió. Desde ahí, tuve un gran crecimiento y mejoré mucho, como persona y como futbolista.

—¿Qué recuerda de su debut en Primera?

—La verdad es que fue muy emocionante. Fue contra el Valencia en la jornada dos con Óscar y fueron 10 minutos, pero para mí fue como una vida entera. Fue muy bonito cuando llegas a casa y ves a tus padres y a tu novia y te das cuenta de que todo el sacrificio sabe la pena.

—Y después, titular contra el Barça.

—A pesar del resultado, la verdad es que lo considero el partido de mi vida porque tuve delante a ídolos de la infancia. La verdad es que fue muy bonito y ojalá que vuelva a ocurrir.

«Menos de lateral zurdo, central y portero, esta temporada he jugado de todo»

Gabri Veiga se considera un jugador polivalente, pero esta temporada ha superado todas las expectativas, y recopilando, solo le quedan tres posiciones por ocupar entre el Celta y su filial.

—Este año es un multiusos, por lo menos jugó en seis posiciones.

—Al final, te tienes que adaptar a lo que toque en donde sea y cuando sea, porque aquí todos queremos jugar, yo me considero un futbolista polivalente y donde decía el míster, yo voy a darlo todo. Si me pone ahí, será porque me ve unas cualidades.

—Repase sus posiciones.

—Con el primer equipo jugué de lateral derecho en Andorra y también en la posición de Brais como interior y algo de mediocentro. En el filial, de segundo punta, incluso de punta de referencia por circunstancias, de mediocentro e incluso extremo. Menos lateral izquierdo, central y portero, casi de todo.

—¿Qué tal de lateral en Andorra?

—Muy bien. Me sorprendió, aunque en algún entreno me había tocado ahí. Lo cogí con mucha confianza, también el entrenador me ayudó mucho y la verdad es que salieron bien las cosas.

—¿Ve opciones de play off para el Celta B esta temporada?

—Nosotros estamos centrados en el día a día y en el partido con el Majadahonda, que va a ser un rival muy duro, y más adelante veremos la clasificación.

—¿Cómo de importante es la cita con el Majadahonda?

—No dejan de ser tres puntos, pero sí que si le echas un ojo a la tabla estamos bastante apretados todos. Es un equipo que en la ida me gustó mucho.