Incidentes entre ultras de Madrid y Celta en los aledaños de Balaídos

Doscientos ultras del Real Madrid y del Celta, un centenar por cada bando, se enfrentaron hoy en la calle Espedrigada en lo que iba a ser una batalla campal que, finalmente, disolvió la Policía Nacional. Los ultras de ambos equipos se citaron a través de las redes sociales para enfrentarse, pero la rápida actuación policial disolvió la reyerta nada más iniciarse, explican en la Comisaría de Vigo-Redondela, que cifran en un herido las secuelas de la pelea disuelta.

Las 200 personas citadas para agredirse se repartían a partes iguales entre ultras de ambos equipos, que juegan esta tarde, a partir de las 18.30 horas, un partido de Liga en el estadio de Balaídos. La Policía Nacional diseñó un dispositivo policial para este encuentro que movilizó a 120 agentes que pertenecen a la Unidad de Intervención Rápida (UIP), a la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) y a patrullas de seguridad ciudadana.

El centenar de ultras del Real Madrid no asistirá al partido de fútbol al prohibirse su entrada al campo. Añaden fuentes oficiales que, pasadas las 17.00 horas, ya regresaban a la capital de España en coches particulares y alquilados. En el caso de los ultras del Celta, tampoco podrán entrar todos al recinto deportivo. A última hora de la mañana, ya tuvo lugar un conato de pelea entre ultras de ambos equipos, mucho menos numeroso que el disuelto en la calle Espedrigada. Se originó cuando los del Real Madrid accedieron a un bar habitual de los radicales vigueses en la calle Eugenio Kraff. En este caso, la actuación policial evitó también que la situación acabase en una batalla campal. 

En ese primer incidente, fueron entre la veintena y la treintena de ultras madridistas que aparecieron en el establecimiento con bates. De inmediato se personaron los antidisturbios y coches de policía con pistolas de goma, con lo que los radicales echaron a correr dirección a la calle Florida y dejando algunos heridos con brechas, según relatan testigos presenciales.

Varios usuarios de redes sociales han colgado vídeos donde se puede apreciar cómo los ultras del conjunto visitante hoy en Balaídos, vestidos de negro y encapuchados en la mayoría de los casos, se desplazaban bajo un cordón policial.

Dos de los heridos han tenido que desplazarse al Punto de Atención Continuada (PAC) del Sergas en la calle Florida, donde uno tuvo que recibir ocho puntos de sutura en la frente después de recibir un golpe con un palo, informaron a Efe fuentes hospitalarias.