El Tucu Hernández pone fin a su carrera profesional

Pedro Pablo Hernández, el Tucu, cuelga las botas a los 37 años. El que fue jugador del Celta entre el 2014 y el 2018 anunció este martes su decisión de despedirse tras dos décadas de carrera profesional y en el club de su vida, al que había vuelto. «Es una decisión personal. Estoy muy agradecido de O’Higgins. Me abrieron las puertas para estar acá. Dije que, si volvía a Chile, el único club en el que jugaría sería este», señaló sobre la entidad donde fue campeón en el 2013 con Eduardo Berizzo, que fue quien apostó por él para jugar en Vigo.

Tiene dos partidos por delante antes de poner el punto y final. Tras ellos, su idea es poder pasar más tiempo con sus hijos, la pequeña de los cuales, Amparo, nació en Vigo. «Quiero dedicarme a mi familia, darles el tiempo que necesitan. Hay cosas que no puedo compartir con ellos por viajes, por concentraciones, y lo van notando cada vez más. Siento que necesito estar con ellos en este momento», ahondó.

Con el Celta, el Tucu disputó 149 partidos entre Liga, Copa del Rey y Europa League, marcando una decena de goles. Aunque le costó adaptarse y meterse al celtismo en el bolsillo, acabó siendo un jugador muy querido y valorado; de hecho, su inesperada decisión de irse en e verano del 2018, con contrato en vigor, fue un jarro de agua fría. Desde entonces, estuvo tres años en Independiente antes de llegar a su último club.

El pasado verano, con motivo del centenario del Celta, recordaba para La Voz su paso por el club vigués: «El paso por el Celta de Vigo fue importantísimo para mi carrera, donde crecí en cuanto a lo profesional, me permitió compartir con compañeros de los cuales aprendí y aquí me gustaría destacar que, como grupo, cada uno supo sacar lo mejor de sí para aportar siempre al equipo».

Hernández s el segundo excéltico de la generación de 1986 que se retira después de Nolito, que comunicó su adiós el pasado mes de septiembre, semanas antes de cumplir los 37, con lo que el Ibiza se convertía en su último equipo.