Cambio de estampa en Balaídos con la grada de Gol portátil

La gran novedad en Balaídos para el Celta-Villarreal de este miércoles fue la puesta de largo de la grada supletoria de Gol, con 609 localidades, un escenario para paliar la falta del mítico graderío que, ya ha comenzado a ser demolido. Los espectadores que adquierieron entradas para esta zona vivieron el partido a pie de campo y pudieron ser testigos directos del primer gol en el estadio municipal vigués -segundo en Primera y tercero con el primer equipo- del canterano vigués Fer López.

Xoán Carlos Gil

El club había puesto a la venta las localidades de esta nueva estructura provisonal el pasado lunes -a quince euros para titulares del Carné Celtista y veinte para el resto de aficionados- y apenas duraron tres horas antes de agotarse. Volverá a estar disponible en los dos partidos que le restan en casa al cuadro que dirige Claudio Giráldez, frente al Sevilla y al Rayo Vallecano. El calendario se completa para los célticos con las visitas al Real Madrid, a la Real Sociedad y, en la última jornada del campeonato, al Getafe.

Sumando estos asientos adicionales, y a pesar de que el partido se celebraba en un miércoles laborable, el registro de asistencia ascensió a 19.324 espectadores, frente a los 19.801 registrados en el anterior partido en casa, ante el Espanyol. Más allá e números, el ambiente fue espectacular y la sensación, de estar cerca del lleno.