Siareiros Dezaos, peña intermitente, celtismo permanente

Los orígenes de la actual peña celtista do Deza, Siareiros Dezaos, hay que buscarlos en los años 50. «Lembro un día sendo eu rapaz que oín botar fogos, saín correndo a ver que pasaba e era que estaba o Celta na estatua de Loriga cos membros da peña. Foi algo que me quedou gravado», dice Suso Rodríguez, primer presidente del colectivo actual, miembro de otro anterior que estuvo activo hace años y acabó por desaparecer y dueño de la sede que utilizan hoy, el bar Suso (Donramiro).

Suso fue testigo de la evolución del celtismo en Lalín, donde la afición por el Celta siempre estuvo muy arraigada. «Conservo fotos e documentos desa primeira peña dos anos 50», cuenta orgulloso. Después vino la de los años 90, a la que él también perteneció y de la que, de hecho, fue uno de los socios fundadores. «Estivo en funcionamento catro ou cinco anos e logo dun cambio de presidente empezou a difuminarse pouco a pouco», recuerda con cierta nostalgia.

Fue hace dos años cuando decidieron ponerle remedio, retomar el proyecto y abrirlo además a celtistas de toda la comarca, cambiando el nombre de la localidad de Lalín por el del Deza -«hai membros de Silleda, Balado, Rodeiro...»-. «Había como unas vinte ou trinta persoas que viñan cada fin de semana ao bar a ver os partidos do Celta. A raíz de xuntarse empezaron a propoñerme que montaramos unha peña», relata. Él se convirtió en su primer presidente y el éxito fue total, con alrededor de 150 socios que hoy se han recudido ligeramente.

«Estabamos en Segunda, aínda que a data oficial pode ser xa despois do ascenso. Pero non foi para nada iso de que ''como as cousas van ben, montamos unha peña'', senón que viña de bastante antes», aclara. Pasados los dos primeros años, en los que puso su experiencia al servicio de un grupo de celtistas muy jóvenes, decidió que era el momento del relevo. «Unha vez que estaba todo máis ou menos organizado e encauzado, quixen que seguiran eles e así foi», comenta. El cabeza visible actual de la peña es José Ramón Porto, al que Suso define como «un pedazo de pan» y un gran presidente para Siareiros Dezaos acompañado de una directiva a la que también pone por las nubes.

Los miembros actuales están en su mayoría entre los 30 y los 35 años -más un puñado de niños a los que no cuentan como socios- y alrededor de una veintena se desplazan a Balaídos para presenciar en directo los partidos del Celta cada vez que el equipo juega como local. «Normalmente van nos seus coches particulares, segundo os horarios nin iso». El bar Suso, con decoración celeste, también es lugar de reunión para presenciar cualquier encuentro del conjunto vigués.

Dice Suso que el balance de estos tres anos de vida de la actual peña no puede ser mejor porque «hai un grupo de xente moi activa e dinámica que se implica moito». De este tiempo reuerda especialmente la visita de la plantilla a Lalín para probar los trajes, lo que les dio la oportunidad de fotografiarse con los futbolistas. También iniciativas que tuvieron, como la reciente cena solidaria con el pueblo saharaui, desencadenada por el hecho de tener un socio del Sáhara, el niño Lehbib Brahim que pasó varios veranos en Lalín.

Próximamente realizarán su habitual asamblea de final de temporada y pondrán fecha a la ya tradicional churrascada celeste. Además, ya han confirmado que organizarán la II Romaría Celeste dentro de un año, tomando el testigo a la edición inaugural que tuvo lugar en Santiago el pasado fin de semana y en la que también estuvieron representandos. «Isto non é para dous días, en Siareiros Dezaos hai celtismo para rato», concluye Suso.