La oposición acusa a Sarkozy de añadir mentiras a las de sus ministros de Interior y Trabajo
Internacional
18 Sep 2010. Actualizado a las 02:00 h.
Políticos opositores franceses criticaron ayer al presidente Nicolas Sarkozy por sus supuestas mentiras respecto a una conversación sobre el caso de los gitanos con la canciller alemana, Angela Merkel.
«Da la impresión de que en el Gobierno empieza a proliferar la costumbre de mentir», dijo el parlamentario socialista Claude Bartolone.
«Esa reunión en Bruselas poco antes de asumir la presidencia del G-20 es una de las peores cosas que le podían pasar al presidente y a Francia», agregó Bartolone. Primero mintieron ministros como Eric Woerth (Trabajo) y Brice Hortefeux (Interior), señaló, y ahora lo hace el propio Sarkozy, dijo.
El palacio del Elíseo no quiso pronunciarse. También el ministro de Exteriores galo, Bernard Kouchner, se distanció de las declaraciones de Sarkozy. En su respuesta sobre quién cree que miente dijo: «Eso lo decidirá la historia». Agregó que no tiene ningún motivo para no creer a Sarkozy, pero tampoco a Merkel.
Por su parte, el secretario de Estado francés de Asuntos Europeos, Pierre Lellouche, afirmó que la crisis europea por las expulsiones de gitanos rumanos y búlgaros de Francia ha permitido al menos acabar con la hipocresía respecto a esta minoría étnica.
«Esta crisis al menos ha permitido reventar la burbuja de la hipocresía» respecto de «una minoría de la que no nos hemos ocupado» durante las ampliaciones de la Unión Europea, declaró Lellouche.
Insistió en que «Francia respeta las instituciones europeas», en alusión al enfrentamiento del jefe del Estado con el presidente de la Comisión Europea.
El secretario de Estado francés aseguró que el problema de los gitanos que han salido de su país de origen «no es solo un problema de Francia y no es solo un problema jurídico». Lamentó que Rumanía no haya dedicado los fondos europeos que ha recibido estos últimos años para favorecer la integración de sus gitanos, ni que haya presentado todavía planes para hacerlo ante las instituciones europeas.