El primer ministro italiano sopesa dimitir ante el acoso de Renzi

Vientos de crisis empiezan a soplar sobre Italia, donde cada vez es más difícil la convivencia entre el primer ministro, Enrico Letta, y Matteo Renzi, secretario de su formación política, el Partido Democrático. Los ataques de este último al Ejecutivo, al que acusa de no llevar a cabo las reformas que el país necesita para salir de la crisis, podrían hacer que Letta presente su dimisión en las próximas horas.

Todos hablan ya de un cambio en el Gobierno. La reunión que Renzi mantuvo por sorpresa el lunes por la noche con el presidente de la república, Giorgio Napolitano, ha abierto las apuestas. La reacción de Letta no se hizo esperar y ayer a primera hora, antes de que el presidente viajase a Portugal, también se reunió con Napolitano para hablar de «cuestiones urgentes de gobierno».

Después de la reunión, el presidente del Gobierno anunció que en las próximas horas presentará una «pacto de coalición con las fuerzas políticas que apoyan al Gobierno. Será una propuesta muy centrada en temas económicos que convencerá a todos los partidos, incluso al PD». Aunque Letta se empeñe en negar el duelo con Renzi y asegure que están «trabajando juntos para solucionar una situación de dificultad», en estos momentos para él resulta fundamental ganar tiempo a fin de hacer frente a las embestidas del joven secretario, que está ansioso por ocupar su puesto. Su lacónico «la providencia decidirá sobre mi destino y el del Gobierno» deja clara la incertidumbre en la que está sumido en estos momentos.

Renzi con Berlusconi

Decisiva será la reunión de la dirección de PD del próximo jueves 20, en la que se analizará si este Gobierno de coalición ayuda a llevar adelante las reformas o no. En ella se podría decidir un cambio en la dirección para llevar a Renzi al frente del Ejecutivo. Mientras tanto, los aliados en el Gobierno también toman posiciones. Angelino Alfano, de Nuevo Centro Derecha, principal valedor de Letta, se reunirá hoy con su partido para analizar la situación. En las filas de los centristas de Scelta Civica ya suenan voces que piden un retiro de Letta para «abrir una nueva fase».

Desde que el alcalde de Florencia llegó a la secretaría del PD en unas elecciones primarias en las que barrió a sus contrincantes, su política ha sido la de dar una de cal y otra de arena al Gobierno de Letta, que ve cómo las críticas más feroces le llegan de su propio partido. Renzi no oculta sus deseos de sustituir a Letta al frente del Ejecutivo, y ya se le adelantó reuniéndose con Silvio Berlusconi para pactar la nueva ley electoral.