La Voz de Galicia

Derribado en el este de Ucrania un avión de Malaysia Airlines con 295 pasajeros

Internacional

Obama y Poroshenko sostienen que todas las pruebas sobre el Boeing-777 de Malaysia Airlines permanecerán en el país para que sean analizadas. El ministerio del Interior confirma que todas las 298 personas que viajaban a bordo están muertas

18 Jul 2014. Actualizado a las 12:50 h.

Un nuevo vuelo de la compañía Malaysia Airlines ha acabado en tragedia. El MH17, un avión de pasajeros malasio con 298 personas a bordo (283 pasajeros y 15 tripulantes), fue derribado este jueves por un misil tierra-aire en Ucrania, cerca de Donetsk, a unos 50 kilómetros de la frontera con Rusia. Según un asesor del Ministerio del Interior, todos los pasajeros han fallecido y los servicios de emergencia se encuentran localizando cadáveres en localidades a 15 kilómetros de distancia. El vicepresidente de la rama Europa de Malaysia Airlines precisó, durante una conferencia de prensa en el aeropuerto de Amsterdam-Schiphol, datos concretos de los pasajeros, de los cuales 154 eran de nacionalidad holandesa, 43 malasios (entre los que se encontraban los miembros de la tripulación y dos niños), 27 australianos, 23 estadounidenses, 23 malasios, doce indonesios (entre ellos, un niño), nueve británicos, cuatro franceses, cuatro alemanes, cuatro belgas, tres filipinos y un canadiense. La compañía aérea también concretó que la nacionalidad de 35 de los pasajeros todavía estaba por determinar. Decenas de ellos -delegados, investigadores y activistas- se dirigían a Australia para participar en una conferencia internacional sobre el Sida. Entre las víctimas podría figurar el expresidente de la Sociedad Internacional del Sida Joep Lange y su esposa, según medios locales. «No se ha confirmado aún, pero tenemos información de que muchos de nuestros colegas y amigos estaban a bordo del avión», ha indicado Françoise Barré-Sinousi, premio nobel en el 2008 por su papel en el descubrimiento del VIH y copresidente de la conferencia. Barré-Sinousi, la investigadora australiana Sharon Lewin y el exsecretario de Salud británico Norman Fowler rindieron tributo hoy a Lange en Camberra. Los servicios de Inteligencia de Estados Unidos han confirmado que el avión de Malaysia Airlines fue derribado por un misil, aunque de momento no está clara su procedencia. Las autoridades norteamericanas detectaron en un primer momento lo que parecía el lanzamiento de un misil desde la superficie y la posterior explosión de un avión, sin embargo no han podido determinar si el proyectil procedía de territorio ucraniano o ruso. Una fuente consultada por The Washington Post ha admitido que «llevará algún tiempo reunir información sobre las intenciones de quienquiera que estuviese implicado» en este ataque, en el que han perdido la vida unas 300 personas. El avión fue derribado cerca de la ciudad Shajtarsk, situada en una región controlada por los separatistas prorrusos. Pedazos del fuselaje destrozado, sobre todo la cola del aparato con el logotipo de la compañía, así como maletas, estaban desperdigados en una vasta zona en la población de Grabove. Según fuentes rebeldes, varias personas resultaron dañadas en tierra, ya que sus casas fueron alcanzadas por los restos del avión siniestrado. Más de 100 restos de los 295 pasajeros que volaban en el avión malasio han sido encontrados ya en el lugar del accidente, según una fuente del Ministerio de Situaciones de Emergencia. «Por ahora no podemos decir el numero exacto de muertos», aseguran, ya que hay restos diseminados en una amplia zona. Según ha confirmado un cámara de la agencia Reuters, los equipos de rescate ucranianos han recuperado ya la segunda caja negra del avión. La primera fue encontrada ayer, según afirmaron los separatistas prorrusos presentes en la zona. Efectivos de los insurgentes del batallón «Vostok» custodian el lugar del accidente del avión, y aunque no impiden los trabajos de los equipos de rescate y de los periodistas sí alejan de la zona a los habitantes locales que intentan acercarse. Antes del ataque, la tripulación del MH17 no había dado señales de problema alguno al sobrevolar Ucrania. «El vuelo sobre el espacio aéreo de Ucrania se llevaba a cabo sin ningún problema», aseguró el jefe interino de los servicios de control aéreo de Ucrania, Dmytro Babeychuk. El avión presidencial de Putin En cuanto a la autoría del ataque, Kiev acusa a los separatistas prorrusos de utilizar un sistema de misiles Buk para derribar el vuelo MH17, mientras que los rebeldes han atribuido a la Fuerza Aérea ucraniana la responsabilidad de su caída. Según una fuente de la Aviación de Rusia, el avión fue derribado por un misil ucraniano que tenía por objetivo el avión del presidente ruso, Vladímir Putin. El mandatario regresaba de Brasil, donde participó en la cumbre de los BRICS, en el avión presidencial, cuyo aspecto exterior coincidie con los de Malaysia Airlines. «Puedo decir que el avión presidencial y el Boeing de Malaysian Airlines se cruzaron en el mismo punto y en el mismo corredor. Esto sucedió cerca de Varsovia en el nivel de vuelo 330a a una altitud de 10.100 metros. El avión presidencial estaba allí a las 16.21 hora local (12.21 gmt) y el avión de Malaysia Airlines a las 15.44 (11.44 gmt)», precisó la fuente. El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, ha asegurado que la caída del avión de Malaysia Airlines se debió a un «acto terrorista». Representantes de la autoproclamada república popular de Donetsk negaron disponer del armamento necesario para derribar un avión que, en esos momentos, ya había alcanzado los 10.000 metros de altura. Para añadir más elementos a la incertidumbre y a la guerra de propaganda que rodea este suceso, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU, siglas en ucraniano) aseguró haber captado una conversación en la que los rebeldes reconocen el derribo del avión de pasajeros. Según el vídeo colgado por el SBU en Youtube, se escucha como uno de los comandantes insurgentes le informa a otro sobre el derribo de un avión comercial en la región de Donetsk. Las pruebas del derribo no saldrán de Ucrania Obama y Poroshenko sostuvieron este jueves que todas las pruebas sobre el derribo del avión deben permanecer en Ucrania para que los investigadores las analicen. «Han recalcado que todas las pruebas han de permanecer en territorio ucraniano hasta que los investigadores internacionales examinen todos los aspectos de la tragedia», informó la Casa Blanca a través de un comunicado publicado tras la conversación, en la que el presidente de Ucrania «dio la bienvenida a la ayuda de investigadores internacionales para garantizar una investigación exhaustiva y transparente en el lugar del accidente» El Boeing-777, que abandonó a las 12.15 horas de Ámsterdam, se dirigía a Kuala Lumpur. En un primer momento, la compañía informó en su cuenta oficial de Twitter que perdió el contacto con el vuelo MH17 sobre las 14.15 horas GMT cuando sobrevolaba el espacio aéreo ucraniano. El primer ministro de Malasia, Najib Razak, anunció que se ha iniciado un investigación para aclarar lo ocurrido con el avión. «Estoy impactado por las informaciones», ha escrito Razak en su cuenta oficial de Twitter. El avión siniestrado volaba en un código compartido de la aerolíneas malasia, como MH17, y como KL4103 por la compañía holandesa KLM, que por el momento tampoco se ha pronunciado sobre lo ocurrido y «espera a tener la confirmación del accidente». Las autoridades de Ucrania han cerrado todas las rutas aéreas que sobrevuelan el este del país.«Todos los planes de vuelo que incluyen esas rutas son rechazados por Eurocontrol», indicó un portavoz de la la Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea. «Esas rutas quedan cerradas hasta nuevo aviso», señaló Eurocontrol.Por su parte, la Asociación Europea de Pilotos (ECA, por sus siglas en inglés) pidió «medidas inmediatas» para garantizar la seguridad de los aviones que sobrevuelan esa región del este de Ucrania, la ruta más frecuentada hacia el sudeste asiático. El presidente de la Asociación, Nico Voorbach, apeló «a las autoridades europeas para que adopten medidas de manera inmediata para garantizar la seguridad de todos los vuelos que sobrevuelan la región».
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