Un premio pulitzer acusa a Obama de mentir sobre la muerte de Osama Bin Laden

El premio Pulitzer Seymour Hersh acusa a la Administración Obama de mentir sobre las circunstancias que rodearon el operativo de los Navy SEALs en el que fue abatido Osama Bin Laden en el 2011. En un artículo publicado el domingo en la London Review of Books, Hersh afirma que el jefe de Al Qaida estaba retenido en la casa de Abbottabad por el servicio secreto pakistaní, y por tanto no hubo una compleja operación de inteligencia para llegar a él, si no que directamente lo ejecutaron. Asegura que la Casa Blanca colaboró con el Gobierno de Islamabad, pese a que siempre ha mantenido que fue informado después de la operación.

La Administración Obama rechazó ayer las «afirmaciones sin fundamento» de Hersh, un reputado periodista que ganó el Pulitzer en 1970 tras revelar la masacre de My Lai en Vietnam, una información que contribuyó a la reacción pública contra esa guerra, y que en el 2004 desveló las torturas en la cárcel iraquí de Abu Ghraib. «Hay demasiadas afirmaciones sin fundamento en ese artículo», dijo el portavoz de Seguridad Nacional, Ned Price.

«La historia que contó la Casa Blanca podría haberla escrito Lewis Carroll», sostiene Hersh en su artículo. Asegura que «la idea de que la operación que mató a Osama Bin Laden era una misión unilateral de EE.UU. es evidentemente falsa». Su fuente, un alto funcionario jubilado de la inteligencia, afirma que Bin Laden no estaba escondido, sino preso en el complejo de Abbottabad. La inteligencia pakistaní (ISI) lo retenía desde el 2006 con el objetivo de usarlo para negociar con los talibanes. A cambio de 25 millones de dólares, un oficial reveló a la CIA donde estaba su enemigo numero uno. El funcionario jubilado «sabía del paradero de Bin Laden en Abbottabad y fue informado del entrenamiento de los seals para llevar a cabo la emboscada».

Los Navy SEALs sabían donde estaba el objetivo: «tercer piso, segunda puerta a la derecha», cuenta la fuente. Cuando llegaron los pakistaníes ya habían abandonado el complejo, tal y como habían pactado previamente. «Osama acobardado, se retiró al dormitorio. Dos tiradores lo siguieron y abrieron fuego. Muy sencillo, un golpe muy simple, muy profesional», añade.

Hersh señala que el cuerpo de Bin Laden no fue arrojado al mar, sino que tras ser envuelto en una bolsa para cadáveres fue lanzado durante el vuelo en helicóptero de regreso a Jalalabad y que algunas partes del cuerpo fueron arrojadas a las montañas del Hindu Kush. Para Hersh, el asesinato fue el punto culminante del primer mandato de Obama y un factor importante en su reelección.