Los 13 soldados ucranianos de la isla de la Serpiente podrían estar vivos y prisioneros en Sebastopol

Hace apenas cuatro días el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, informó de la muerte de 13 soldados fronterizos en un bombardeo en la isla de la Serpiente. Militares que se convirtieron así en el símbolo de la resistencia ucraniana al haber hecho frente a un buque de guerra ruso en ese pequeño islote. Sin embargo, ahora el Servicio Estatal de Guardia Fronteriza del país ha ofrecido otra versión que contradice las afirmaciones iniciales: los 13 podrían estar vivos y haber sido capturados como prisioneros por las fuerzas militares de Rusia. Los medios de comunicación rusos informaron incluso este sábado de esta nueva realidad y de la captura de los militares.

Posteriormente, el Servicio Estatal de Guardia Fronteriza de Ucrania informó, a través de un comunicado oficial en su página de Facebook, que tienen razones para creer que los soldados habrían sobrevivido y que, tal y como afirmaba la versión rusa, los 13 podrían estar bajo custodia del ejército del Kremlin tras ser trasladados del lugar del combate a Sebastopol, una ciudad portuaria que Rusia controla en Crimea. 

Zelenski hizo pública la historia de los guardias el jueves y destacó que eran un símbolo de la resistencia de la población ucraniana a la invasión rusa. A través de un vídeo aseguró que los soldados habían «muerto heroicamente» y que serían condecorados de forma póstuma con el máximo reconocimiento que podía ofrecer el país: el título de Héroe de Ucrania. «Que la memoria de aquellos que dieron su vida por Ucrania viva para siempre», dijo Zelenski.

La información despertó el interés de la prensa internacional, especialmente porque trascendió un audio en el que se escuchaba el momento exacto en el que el buque ruso anunciaba su llegada y pedía la rendición al grupo de guardas fronterizos que protegían la isla de la Serpiente. En el audio del intercambio por radio, divulgado por el medio ucraniano Ukrayinska Pravda (La Verdad de Ucrania), se escucha la contundente respuesta de un soldado del destacamento ucraniano: «Buque de guerra ruso, vete a la mierda». Y esas fueron las últimas palabras conocidas que se escucharon desde la isla. No obstante, todo indica que el Gobierno dio por hecho que los 13 habían sido asesinados.

El comunicado que ha ofrecido el Servicio Estatal de Guardia Fronteriza ucraniano, asegura que el grupo había sido atacado tanto por armas navales como por aviones de combate rusos. También indicaron que la infraestructura había sido destruida y la isla había sido conquistada por las fuerzas militares de Putin. Señalaron que los soldados, que se habrían atrincheraron en la isla, se habían defendido con valentía de los enemigos, contrario a las afirmaciones de los medios rusos, que aseguran que los 13 se habrían rendido.

Finalmente, apuntaron que estaban trabajando para determinar cuál era su paradero exacto, luego de haber recibido información sobre su posible ubicación. «Esperamos sinceramente que los niños regresen a casa lo antes posible», concluye el comunicado.