Sanremo indigna a la derecha italiana, pero alcanza los 14 millones de espectadores

El Festival de Sanremo, el principal certamen dedicado a la canción italiana, terminó en la madrugada del domingo; lo ganó Marco Mengoni, de 34 años, que ya lo había ganado en el 2013. Pero la 73.ª edición del Festival pasará a la historia no tanto por las canciones, sino por las polémicas políticas que suscitó desde el primer día. Empezando por las críticas del ministro de Transportes y líder del partido de extrema derecha Liga, Matteo Salvini, quien no apreció la actuación de Roberto Benigni, el cómico toscano que pronunció un largo elogio de la Constitución italiana durante la noche inaugural, el martes. «No creo que haya que defender la Constitución desde el escenario de Sanremo», dijo el ministro. «Que el Festival se llene de contenidos extra-festival, como la guerra y demás, no me gusta».

Salvini y otros exponentes de la derecha no apreciaron la idea lanzada poco antes del comienzo del certamen de que el presidente Zelenski conectara en directo desde Ucrania. Al final, Zelenski no se conectó, ni envió un mensaje de vídeo, pero el presentador del Festival leyó un mensaje de su parte cuando el evento se acercaba a su fin, sobre las dos de la madrugada del domingo. También suscitó polémica uno de los cantantes del concurso, Rosa Chemical, que durante su actuación simuló una relación sexual con uno de los espectadores, el rapero y marido de Chiara Ferragni, Fedez, arrastrándolo al escenario y dándole un largo beso en la boca.

El viernes, el propio Fedez y otro rapero, J-Ax, pidieron a la primera ministra, Giorgia Meloni, que legalice el cannabis. En la noche del jueves, una de las presentadoras del certamen, la campeona afrodescendiente de voleibol Paola Egonu, tildó a Italia de racista; sus palabras dividieron al país transalpino. 

Politizado

La derecha está indignada, y acusa al Festival de estar politizado, y según informan los medios italianos, la misma Meloni opina que «se ha pasado de la raya». Pero en redes, muchos alaban a Rosa Chemical y Fedez por su defensa de los derechos LGTB. De todos modos, el Festival de Sanremo parece seguir gustando a los italianos, y esta edición tuvo picos de 14 millones de espectadores: todo un éxito.