Argentina afronta unas elecciones con una incertidumbre total

Hoy todos los ciudadanos argentinos mayores de 16 años están llamados a las urnas. Además de presidente y vicepresidente, se definirá la renovación de 130 diputados y 24 senadores, y se designarán 43 representantes al Parlasur, el órgano legislativo del Mercosur.

Habrá segunda vuelta en caso de que ningún candidato obtenga el 45 % de los votos válidos, o en el supuesto de que ningún candidato obtenga el 40 % con una diferencia de al menos 10 puntos del segundo. La segunda vuelta, en caso de ser necesaria, será el 19 de noviembre.

Por ahora, y con los resultados de las principales encuestas en mano, la mayor parte de las encuestas auguran una segunda vuelta entre Milei y Massa, aunque difieren en la cantidad de puntos que separan a unos y otros. La novedad de estos últimos días fue una encuesta publicada por la CNN, de la consultora brasileña Atlas Intel  —que anticipó el resultado de los comicios en el 2019 y la definición de la interna entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez—, que ubicó a Bullrich aparece en un tercer lugar a solo dos puntos de Milei.  Sergio Massa en el primer lugar, con una ventaja de casi cinco puntos sobre Milei.

Si bien estaba cantado que la que más tenía para perder en la polarización del voto entre Milei y Massa era Bullrich, porque quedaba en medio de dos propuestas bastante más claras, su propia performance en la campaña electoral tras el PASO no colaboró para nada. La ex ministra de Seguridad de Macri se desenvuelve muy bien en el terreno del orden y la seguridad, pero se pierde y balbucea cuando tiene que explicar su propuesta en materia económica. En ese sentido, Massa —que podía ser el que más tenía para perder en esta materia, dada su doble condición de candidato del oficialismo y ministro de Economía de una gestión a todas luces fracasada—, demostró que su experiencia, sus vínculos con distintos sectores del poder, y su ambición, le valieron para capear la tormenta, y contar con muchas oportunidades de entrar a una eventual segunda vuelta en medio de la crisis económica. 

Entusiasmo libertario

Por el lado de Milei todo es entusiasmo, y los libertarios se dejan llevar por la ilusión de un triunfo en la primera vuelta. Milei cerró su campaña en el mismo estadio en el que lo había hecho en la previa a las PASO (Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) y se lo vio tan enfervorizado como en los viejos tiempos, o antes de las elecciones primarias, cuando se hizo conocido por sus exabruptos y su tono encolerizado. El Milei moderado, una vez quedaron atrás las PASO, es producto de una estrategia de campaña que, según cuentan quienes lo conocen de cerca, no podrá sostener mucho tiempo. 

Sergio Massa y Patricia Bullrich llevaron adelante sus propios cierres de campaña con diversos actos en el interior del país, en la provincia y en la ciudad de Buenos Aires. La provincia de la capital del país —en la que no hay segunda vuelta- representa el 37 % del padrón electoral, es el bastión kirchnerista, y todo indica que el actual gobernador, Axel Kicillof, será reelegido.

En cambio, en la ciudad de Buenos Aires —donde sí existe la posibilidad de una segunda vuelta—, los sondeos auguran un triunfo de Jorge Macri, primo del expresidente del Gobierno, pero con un resultado que no le alcanzaría para la victoria. El segundo lugar se lo disputan Leandro Santoro de Unión por la Patria, y Ramiro Marra, de La Libertad Avanza.

El voto gallego en estas elecciones en su quinta provincia

Cristina Moreiras, de 72 años, vive en el barrio de Belgrano, está jubilada, y es la madre del candidato a alcalde de la ciudad de Buenos Aires por La Libertad Avanza, el partido de Javier Milei. «Nací en Argentina, pero soy pura sangre gallega», se presenta. «Mi madre y mi padre eran de la aldea de Susa (Taboada, Lugo)». Cristina dice que, aunque no fuera la madre de Ramiro, igual votaría a Milei porque «es el único que plantea un cambio de fondo». Respecto a los cambios que dice acompañar, cuenta que «son fundamentalmente ideológicos. Yo era docente y te puedo asegurar que a los chicos les meten ideas en la cabeza, y un docente no puede hablar de política en el aula».

Federico Conditi, de 40 años, es director nacional de Proyectos Especiales del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, vive en el barrio de Núñez y su candidato para estas elecciones es Sergio Massa. Oriunda de Cimadevila y de apellido Cartea Pedrido, su abuela materna le dio una familia con la que aún se relaciona y por la que cada tanto viaja a Galicia. Federico militó siempre en el peronismo de la ciudad de Buenos Aires y vota a Unión por la Patria (UP). «Creo que es un momento muy difícil en el que hay que corregir muchas cosas, y UP es la única opción para que esas correcciones se hagan de una manera socialmente viable, y con el menor coste posible para los sectores medios y para los que menos tienen. Milei y su motosierra, vienen a recortar, y van a hacer pagar a los que menos tienen».

Un proyecto «sólido»

Gastón Juan tiene 42 años y es abogado, vive en el barrio de Barracas y es nieto de gallegos de Pontevedra. Gastón y Federico se conocen y, eventualmente, colaboran en proyectos como el del Club Deportivo Español, un club fundado por españoles residentes en Argentina. Gastón vota a Juntos por el Cambio porque es el espacio donde milita y con el que mejor se siente representado: «Creo que es el único espacio que tiene un proyecto político sólido y con la capacidad de llevarlo adelante, frente a otras propuestas como la del espacio que viene gobernando con una inflación de 3 dígitos y una devaluación permanente de la moneda».