Putin anuncia que «estamos a las puertas de la tercera guerra mundial»

Un conflicto directo entre Moscú y la OTAN colocaría al planeta a un paso de la Tercera Guerra Mundial. Así lo aseguró ayer Vladimir Putin, mientras barría las migajas de los tres opositores que había diseñado a su gusto para las presidenciales rusas. «Todo es posible en el mundo moderno», bromeó.

Un mes antes, el presidente francés, Emmanuel Macron, había amenazado con desplegar tropas de la Alianza Atlántica en Ucrania y, aunque muchos países occidentales rechazaron la idea, otros —sobre todo en Europa del Este— expresaron su apoyo.

«Nuestras tropas ya han escuchado inglés y francés en el campo de batalla», aseveró Putin, que sostuvo que algunos soldados de la OTAN ya están en suelo ucraniano. Pero «eso no tiene nada de bueno, lo único que van a conseguir es morir en masa», añadió el autócrata, a la vez que celebraba su victoria más escandalosa hasta la fecha. Con todos los votos escrutados —incluidos los electrónicos, totalmente opacos—, la Comisión Electoral Central determinó que Putin se hizo con un 87,3 % del sufragio. Todo un espaldarazo para los planes de un hombre que sumará seis años más a los 20 que lleva al frente de su país.

Ganarle a Ucrania

Putin aseguró que su prioridad en este nuevo mandato será continuar la guerra contra Ucrania y conseguir los objetivos que se marcó cuando la emprendió: «En primer lugar, debemos fortalecer nuestras capacidades de defensa y nuestras Fuerzas Armadas. Sueño con una Rusia fuerte, independiente y soberana, y espero que los resultados de la votación nos permitan a todos, alcanzar esa meta».

Sugirió que «en algún momento» va a haber que instaurar una franja de seguridad en la región de Járkov para proteger a Bélgorod de los constantes ataques ucranianos y de milicias rusas contrarias al Kremlin. «Deberá ser lo suficientemente extensa y difícil de superar como para impedir que armamentos de fabricación extranjera bombardeen territorio ruso», aclaró, a la vez que esos bombardeos dejaban al menos cuatro muertos más.

En cuanto a Macron, el autócrata le recomendó que deje de intentar agravar la guerra e intente buscar la paz. «No todo está perdido todavía, estamos dispuestos a negociar», acució.

Mención a Navalni

Por primera vez desde la muerte del opositor Alexéi Navalni —el 16 de febrero—, el mandatario moscovita se atrevió a pronunciar su nombre. «Así es la vida», lamentó cínicamente, entre decenas de dedos que lo acusan de haber ordenado su asesinato: «Siempre ha habido casos de personas que fallecen en prisiones. ¿No ha pasado en Estados Unidos? Sí, y más de una vez».

Después confirmó los rumores de que el disidente estaba a punto de ser canjeado por un miembro del Servicio Federal de Seguridad (FSB) preso en Alemania. «Algunos colegas, que no son miembros de la Administración, me comentaron la posibilidad de ese intercambio. Pueden creerme o no, pero la persona que habló conmigo aún no había terminado la frase y dije: ‘Estoy de acuerdo’».

La única condición para el canje era «que se quedara allí y nunca regresara a Rusia», pero «qué se le va a hacer, estas cosas pasan».

Irán, Corea del Norte, Venezuela y Cuba felicitan al ruso, Occidente lo tacha de ilegal

Países como Irán, China, Venezuela y Corea del Norte han felicitado al presidente ruso, Vladimir Putin, por su victoria en las elecciones de este fin de semana. En cambio, los países occidentales —en especial la UE— han calificado la cita de ilegal y antidemocrática.

El respaldo a Putin viene de aquellos países que, o bien le suministran armamento en su guerra con Ucrania, o bien no condenan la invasión. Entre ellos destaca China, cuyo presidente, Xi Jinping, da «gran importancia» al desarrollo de sus relaciones con Moscú.

El presidente de Irán, Ebrahim Raisí, felicitó a Putin por su «contundente victoria», expresó «su satisfacción» por la expansión de las relaciones entre los dos países.

Al otro lado de la balanza, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, afirmó que la UE «no reconoce ni reconocerá nunca la celebración de las denominadas ‘elecciones’ en los territorios de Ucrania ni sus resultados».

España, Polonia, Francia, Italia y el Reino Unido se unieron a su condena. «No fueron libres ni justas, e involucraron territorios ocupados ilegalmente», recordó el italiano Antonio Tajani.

Albares dice que la victoria está «lejos de lo que se considera democrático»

El ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, afirmó ayer que los comicios presidenciales en Rusia han estado «muy alejados» de lo que en la UE en y España se consideran «elecciones democráticas con las garantías mínimas necesarias».

Añadió que no conceden «ninguna legitimidad ni se puede derivar ningún derecho» de los procesos electorales organizados por Rusia «en territorios ucranianos ocupados militarmente».

«Ha habido unos simulacros de elecciones en territorios ucranianos ocupados militarmente», comentó.

Albares señaló que los ministros de Exteriores comunitarios iban a tratar «las posibles sanciones con relación a la muerte» del líder opositor ruso Alexéi Navalni.