Israel cerca un hospital de Yabalia: «Estamos bajo asedio, nadie puede salir ni entrar»

El Ejército de Israel inició ayer un nuevo asedio del hospital Al Awda de Yabalia, uno de los pocos que continúan operando en Gaza, tras bombardear con tanques sus alrededores, según confirmaron a Efe fuentes del centro sanitario. «Estamos bajo asedio, nadie puede salir ni entrar», relató Mohammed Salha, que trabaja como voluntario en el hospital desde hace meses. Las fuerzas israelíes bombardearon con tanques y dispararon contra los alrededores del Al Awda hasta establecer un cerco a unos 30 metros del centro, según su testimonio. Salha recordó que es la segunda vez que el Ejército bloquea el hospital —el único en el norte de Gaza con servicios de ortopedia, ginecología y obstetricia—, ya que en diciembre del 2023 el Al Awda vivió un asedio de 18 días en el que tres médicos murieron y otros doce resultaron heridos.

Las fuerzas israelíes intensificaron sus ataques contra la ciudad y el campo de refugiados de Yabalia el 11 de mayo, bajo la premisa de que los milicianos de Hamás se estaban reagrupando en la zona.

Mientras, el Gobierno iraní confirmó este domingo que está manteniendo conversaciones indirectas en Omán con altos representantes estadounidenses para intentar contener una expansión regional de la guerra entre Israel y Hamás, que en abril atravesó un momento álgido con la ejecución del primer ataque directo de Irán contra territorio israelí.

Las víctimas siguen aumentando y, al menos, 31 gazatíes, entre ellos mujeres y niños, murieron en el bombardeo israelí de un edificio residencial en el campamento de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja, que sufrió nuevos ataques también en los flancos norte y sur. Los muertos palestinos alcanzaron este domingo los 35.456, tras, al menos, 70 víctimas mortales en ataques de artillería y bombardeos israelíes las últimas 24 horas, según el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás. Además, la policía fronteriza israelí mató a un palestino en Cisjordania después de que este supuestamente intentara atacarles con un destornillador.

La ofensiva terrestre israelí contra Rafah, iniciada el 6 de mayo, ha obligado a huir de allí a 800.000 gazatíes, casi la mitad de quienes se refugiaban en esta ciudad, según la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA). Su comisario general, Philippe Lazzarini, denunció que esta evacuación forzosa empuja a los palestinos a regresar a zonas destruidas y sin infraestructura. «La pregunta es: ¿adónde van a ir? No hay ningún lugar donde ir porque ningún sitio es seguro para ellos en la Franja de Gaza», lamentó.

Bloqueo y ataques a la ayuda humanitaria

Desde la toma militar israelí del cruce de Rafah hace trece días, su Ejército ha impedido la entrada de unos 3.000 camiones de ayuda humanitaria, tanto por este cruce como por el de Kerem Shalom, según el Ejecutivo gazatí. Al bloqueo de alimentos y medicinas por parte de los soldados hay que sumar los ataques de colonos a los vehículos, como el de este domingo, cuando destrozaron parte del cargamento de dos camiones repletos de alimentos en un cruce de la ciudad palestina de Tarqumiya, a doce kilómetros al noroeste de Hebrón (Cisjordania), en un incidente que ya eleva los ataques a cinco en lo que va de mayo.