Israel desoye a la Corte Internacional y causa una masacre de civiles en Rafah

Ni los apremios estadounidense, ni las exigencias de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) ni las presiones de la comunidad internacional para que Israel no atacara Rafah pudieron evitar lo inevitable. Haciendo oídos sordos a todas las advertencias, el Ejército israelí bombardeó un campamento de desplazados emplazado en una supuesta «zona segura» en el barrio de Tal al Sultan, en el noroeste de Rafah que acabó con la vida de al menos 45 personas en la noche del domingo al lunes, de entre los cuales hay una decena de mujeres, ocho niños y tres ancianos. El primer ministro Benjamín Netanyahu calificó lo sucedido de un «trágico percance», mientras la fiscala general militar, el mayor general Yifat Tomer-Yerushalmi, ordenó abrir una investigación y cesó a dos oficiales.

Según un comunicado castrense, el ataque se perpetró sin orden de evacuación previa de la zona, «basado en inteligencia precisa» y dirigido contra dos altos cargos de Hamás: el comandante de la división en Cisjordania, Yasín Rabia, y otro alto mando de esa misma división, Jaled Nagar. Horas antes, el grupo lanzó ocho cohetes al centro de Israel sin causar daños. No se confirmó la muerte de ninguno de los dos cabecillas, pero sí de 45 civiles. La cifra de muertos en la Franja excede ya los 36.000, según las autoridades sanitarias.

En las imágenes grabadas por palestinos tras el ataque se muestran tiendas improvisadas incendiadas por el efecto de la explosión y cuerpos calcinados. La fiscala Tomer-Yerushalmi calificó el incidente como «muy grave», pero excusó que «durante la guerra, se producen incidentes en los que se levantan las sospechas sobre la violación de las leyes de la guerra y las órdenes militares», aunque «no son la norma». 

Indignación internacional

La mayoría de países europeos no ven como «errores» aislados ataques como el del campamento en Rafah o contra el convoy militar de World Central Kitchen que acabó con la vida de siete trabajadores humanitarios. Aunque, el eje francoalemán se pronunció en términos dispares. El presidente Emmanuel Macron aseguró estar «indignado» por el bombardeo de Rafah. Por la parte germana, el portavoz del Ejecutivo, Steffen Hebestreit, restó gravedad al asunto y señaló que «en cualquier caso, hubo un error» .

El jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, aseguró estar «horrorizado» antes de recordar a Israel que las medidas cautelares impuestas por la CIJ, con sede en La Haya, son «de obligado cumplimiento». En ese mismo sentido, los ministros de Exteriores de los Veintisiete reunidos este lunes en Bruselas pidieron a Borrell que elabore una lista de medidas que la UE podría aplicar a Israel y que detalle qué ha hecho el bloque en otras ocasiones en las que un Estado ha incumplido «de forma flagrante» la ley internacional. A su salida del encuentro, el ministro irlandés desveló que por primera vez en el seno de la UE se produjo una «discusión significativa» sobre aplicar sanciones a Israel si no cumple las medidas cautelares impuestas por la CIJ.

Tel Aviv amenaza a España: «Dañaremos a quien nos dañe»

O. Hernández/ A. Azpiroz

Las críticas de Israel hacia España subieron ayer un tono aún más alto en la víspera de que el Consejo de Ministros reconozca este martes el Estado palestino como un país independiente. Su ministro de Exteriores, Israel Katz, oficializó no solo la prohibición de que el consulado español en Jerusalén atienda a ciudadanos palestinos, sino que además lanzó un mensaje cuanto menos intimidatorio. Aficionado a expresarse en las redes sociales, Katz, del departido conservador Likud aunque no del ala más ultraderechista del Gobierno, acompañó una nota diplomática con unas declaraciones amenazantes hacía el Gobierno de Pedro Sánchez.

«A aquellos que nos hacen daño, nosotros les haremos daño en respuesta», prometió el jefe de la diplomacia israelí, que añadió que «los tiempos de la Inquisición han terminado». «No permaneceremos callados ante un Gobierno que premia el terror y cuyos líderes Pedro Sánchez y Yolanda Díaz corean el lema antisemita ‘Del río al mar, Palestina será libre'». A modo de acuse de recibo, Katz etiquetó en su tuit a Alberto Núñez Feijoo. En sus comentarios el ministro israelí no hizo referencia alguna al líder de la oposición pero dejó claro su interés de que se diese por enterado. Ya el domingo Katz cargó contra España al colgar en las redes sociales un vídeo en el que figuraba sobrescrito: «Hamás: Gracias España». 

La solución de los dos Estados

Dentro de la UE los primeros en dar el paso del reconocimiento hace tres décadas fueron los países del antiguo bloque comunista por orden de Moscú. Suecia lo hizo después en el 2014 como una de las primeras promesas de un recién elegido Gobierno socialdemócrata, lo que le costó también al país nórdico encendidas críticas y amenazas de represalias desde Tel Aviv. Este martes, España e Irlanda reconocerán también al Estado palestino de forma conjunta, a lo que se sumará Noruega, país que no forma parte de los Veintisiete. Los jefes de la diplomacia de estos tres países justificaron ayer en Bruselas que esta decisión es «un paso decisivo» para hacer efectiva la solución de los dos Estados, por la que apuesta incluso la Administración Biden. Los ministros de Exteriores de los tres países europeos defendieron que es «el momento adecuado» para dar este «paso adelante».

Frente a la lentitud de la UE, que funciona con un sistema de vetos que dificulta los posicionamientos políticos, los tres países han decidido actuar por iniciativa propia y reconocer al Estado palestino. Y ahora esperan que otros países europeos sigan su ejemplo. El ministro de Exteriores irlandés, Micheal Martin, subrayó que «no puede haber solución militar a este conflicto». «Elegimos la diplomacia sobre la violencia», añadió. «Es de justicia para el pueblo palestino, es la mejor garantía de seguridad para Israel y es necesario para la paz en Oriente Medio», insistió Albares.

Durante su reunión, los ministros de Exteriores también comentaron los vídeos que Israel ha dirigido contra los tres países. «Estamos de acuerdo en que es inaceptable, pero no vamos a caer en ninguna provocación que nos aleje de nuestro objetivo de reconocer a Palestina y de hacer todo lo posible para lograr un alto el fuego», destacó el jefe de la diplomacia española. El Estado hebreo ha lanzado una ofensiva mediática contra España, Noruega e Irlanda con el fin de disuadir a otros países occidentales de reconocer a Palestina. El último capítulo de estas turbulentas relaciones se produjo anoche y tuvo de nuevo como protagonista al ministro Katz: «El pueblo israelí y el pueblo español son pueblos amigos. No permitiremos que nos separaréis ni tú, Pedro Sánchez ni tú Yolanda Díaz».