Absuelven a Salvini del juicio por vetar el desembarco del Open Arms en Italia

El viceprimer ministro Matteo Salvini ha sido absuelto con fórmula plena, es decir de forma total, este viernes por los jueces del tribunal de Palermo, la capital de Sicilia. Salvini estaba acusado de los delitos de secuestro de personas y omisión de actos oficiales, y la Fiscalía había reclamado la pena de seis años de prisión, pero los jueces se han pronunciado afirmando que «los hechos no los hechos no subsisten».

Estos se remontan a agosto del 2019. El actual viceprimer ministro y secretario del partido de extrema derecha Liga, era entonces ministro del Interior en el Gobierno de coalición entre su partido y el Movimiento 5 Estrellas (M5E). En el marco de su política de «puertos cerrados», Salvini prohibió durante diecinueve días que un barco de Open Arms, la oenegé española fundada por Óscar Camps, atracara en un puerto italiano con los 147 migrantes que albergaba. Solo la intervención de la fiscalía de Agrigento (Sicilia) permitió que todos los migrantes pudieran desembarcar. «Volvería a hacer lo que hice», dijo Salvini a la prensa acudiendo a la vista.

El juicio ha terminado a favor del político, que también ejerce como ministro de Infraestructuras en el Gobierno de la ultraderechista Meloni. La defensa de la conocida abogada Giulia Bongiorno, senadora de la Liga y presidenta de la Comisión de Justicia del Senado, ha funcionado. Según la letrada, Open Arms actuó principalmente con el objetivo de crear problemas a Salvini y al Gobierno de entonces. Bongiorno afirmó que el barco de la oenegé podría haber desembarcado en un puerto español o norteafricano, pero prefirió «marear la perdiz durante días».

Para Salvini es todo un éxito. Los jueces confirman así indirectamente la legalidad de la estrategia de «puertos cerrados» para frenar la inmigración ilegal puesta en marcha por el Gobierno de entonces, una inédita coalición antisistema entre la Liga y los populistas del M5E, cuya postura actual se sitúa en la izquierda pero en el 2019 era mucho más ambigua.

Salvini ha reiterado que defendió la soberanía nacional impidiendo que el barco de Open Arms atracara y que simplemente había «hecho su trabajo». El tribunal de Palermo acepta sus argumentos y rechaza los de los fiscales, según los cuales es un principio fundamental de toda democracia que los derechos humanos prevalezcan sobre la protección de la soberanía.

Refuerzo para su Gobierno

El veredicto refuerza al Gobierno, entre cuyos objetivos figura la lucha sin cuartel contra la inmigración ilegal, incluso por vías poco escrupulosas como el acuerdo para deportar a inmigrantes irregulares a los centros construidos en Albania. Salvini podría ahora sacar provecho del veredicto para relanzar su imagen y reforzar su control sobre el partido a costa de los barones que, descontentos con los recientes resultados electorales, le acusan de haber llevado el partido demasiado a la derecha.

Por otro lado, Salvini movilizó a su favor a la derecha italiana e incluso europea. El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, publicó en X una foto de Salvini entrando en el tribunal acompañada por la frase: «Estamos contigo, amigo mío. Salvini merece una medalla por defender Europa». Orbán, junto con otros miembros de los partidos de extrema derecha que forman el grupo Patriotas por Europa en la Eurocámara, como Santiago Abascal, de Vox, se había fotografiado con una camiseta con la foto de Salvini y la frase: «Culpable de defender a Italia».