Chinches: ¿transmiten enfermedades?, ¿cómo actuar ante una plaga?

Las chinches, sin pagar alquiler, han vivido en nuestras casas desde hace miles de años. Puede ser difícil distinguir sus picaduras de los de otros insectos o de erupciones cutáneas. Se suelen refugiar en áreas con falta de ventilación, en mobiliario mal cuidado o donde hay demasiada humedad. 

¿Qué son las chinches?

Son insectos hematófagos. Tienen una forma ovalada y sin alas. Miden aproximadamente 5 milímetros—esto si ya están en estado adulto—, son color café y su cuerpo es plano. Las más jóvenes, llamadas ninfas, tienen un color bastante más claro que las adultas. Su método es pinchar para alimentarse de sangre humana o de animales, normalmente de noche. Lo que hacen es inyectar saliva durante el proceso y así evitar que se coagule la sangre del huésped. 

¿Hay distintos tipos?

Existen tres variedades de chinches: Cimex lectularius, Cimex hemipterus y Leptocimex boueti. Estos insectos son atraídos por el calor corporal, nuestro aroma y el dióxido de carbono que liberamos al respirar. Prefieren alimentarse cuando estamos inmóviles, convirtiéndonos en presas más accesibles.

¿Dónde pueden aparecer y cómo evitarlas?

Las chinches pueden permanecer seis meses sin comer y casi un año sin alimentarse de humanos. Aunque lo normal es que coman cada cinco o diez días y siempre de noche. Los lugares más comunes en los que se encuentran son grietas en las paredes, colchones, muebles, sillas o sillones e, incluso, en el transporte público.

Para intentar evitar la aparición de estos insectos hay que evitar espacios con condiciones higiénicas deficientes. Cuando se hagan viajes, es recomendable lavar todas las prendas cuando se regrese al hogar. En el caso de que te tengas que hospedar en un hotel, es aconsejable no apoyar la maleta directamente en el suelo. Pasando a la cama, hay que observar tanto el colchón como la cabecera. En el caso de que se encuentren estos insectos, tanto en casa como en un hotel, lo recomendable es lavar y secar la ropa de cama a altas temperaturas. Y en muchas ocasiones hay que usar pesticidas, aunque se ha descrito que estos insectos tienen una gran resistencia a muchos de ellos. 

Si estas recomendaciones no resultan ser suficientes y se ha probado a incrementar el calor en las instalaciones, se aconseja la contratación de un profesional de control de plagas y con experiencia para poder eliminarlas definitivamente.

¿Tienen algún riesgo para la salud?

¡Tranquilidad! Las reacciones alérgicas más graves no son muy frecuentes. Por otro lado, para seguir manteniendo la calma, no propagan ni transmiten enfermedades. Lo que sí es posible es presentar pequeñas manchas o picazón en la zona. Por lo general, suelen atacar a las áreas que están expuestas, es decir, la cara, el cuello, las manos y los brazos. 

¿Qué síntomas se pueden tener?

En la mayoría de los casos, los síntomas ocurren casi inmediatamente después de la picadura, pero también pueden desarrollarse o progresar en los días siguientes. Sin mayor irritación, generalmente se resuelven después de una semana más o menos. 

En el caso de que se desarrolle una reacción alérgica grave, se puede tener dificultad para respirar, pueden aparecer además otros síntomas como ampollas, fiebre, inflamación de la lengua, ritmo cardíaco irregular o náuseas. 

Es importante conocer todos estos síntomas, ya que este cuadro puede en muchos casos confundirse con enfermedades potencialmente graves como la varicela, la infección por virus del herpes simple o enfermedades ampollosas autoinmunes. El diagnóstico diferencial ayudará a evitar la administración de tratamientos erróneos con posibles efectos adversos importantes.

¿Cómo se tratan estas picaduras?

Lo primero es lavar la zona con agua y jabón. Para aliviar el picor puedes utilizar pomadas recomendadas de venta libre en farmacias o aplicar compresas frías. Es importante que intentes no rascarte el área afectada, ya que hacerlo puede provocar una infección. En este caso, deberías acudir a un especialista para que te recete algún fármaco para combatirla, como puede ser un antibiótico. En el caso de que haya una respuesta inmune muy severa, se pueden administrar corticosteroides inyectables, antihistamínicos o epinefrina.

El caos de las chinches:¿qué está sucediendo en París?

Desaparecieron oficialmente de Francia a finales de la década del 50, pero con el paso de los años, las chinches han vuelto y todo indica que lo han hecho para quedarse. Esta plaga se extiende, desde hace semanas, por el país y se ha convertido en un gran quebradero de cabeza para las autoridades francesas.

Concretamente, hace un mes que se avistaron las primeras chinches. Estos insectos están inundando incluso los cines, el transporte público y los hospitales. De hecho, algunos expertos sugieren que esta incidencia puede haber regresado a niveles no vistos desde la Europa anterior a la Segunda Guerra Mundial.

Situación actual en España

La Asociación de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla) ha alertado acerca del aumento de chinches en España. En los últimos años, se ha producido un incremento del 20 % de los servicios prestados para combatir las chinches de la cama. El crecimiento de esta plaga se está produciendo en la mayoría de las comunidades autónomas españolas, especialmente en la comunidad canaria, donde se ha registrado un aumento de los servicios prestados por las empresas de control de plagas y vectores sanitarios de hasta el 90 %, y de hasta un 50 % en la zona del Mediterráneo. Las intervenciones son, por tanto, superiores en la zona costera española, donde el flujo de turistas es mayor.