El sur lucense afronta un verano difícil ante el riesgo de incendios

El incendio que ayer permanecía activo en el municipio lucense de Ribas de Sil ha sido finalmente estabilizado. Como ya había trascendido, el martes se produjo un incendio forestal en la parroquia de San Clodio. Las llamas se propagaron rápidamente y afectaron a una parte del monte de A Moá.

El fuego se registró pasadas las ocho de la tarde y en su extinción participaron un total de 9 agentes, 21 brigadas, 13 motobombas, 2 palas y 9 helicópteros. Así, la Consellería do Medio Rural informa de que se dio por estabilizado a las dos menos veinte de la tarde de ayer, y los efectivos desplegados calcularon que se habían calcinado unas 125 hectáreas de monte raso y arbolado.

Este incendio es uno más de los que han azotado el sur de Lugo durante esta semana. El fuerte viento y las altas temperaturas de estos días, unidos a la escasez de lluvia, han propiciado esta situación. En total, esta semana se han producido cuatro incendios forestales. Además del de Ribas de Sil, han ardido casi tres hectáreas en la parroquia de San Vitorio de Ribas de Miño, en el municipio de O Saviñao; una en el lugar de A Vide, en Monforte de Lemos; y algunos terrenos en Toldaos, cerca del balneario de Augas Santas en Pantón. Si los sumamos, en total se han calcinado más de 130 hectáreas en la zona en solo tres días.

Los efectivos disponibles

Todos los ayuntamientos de los municipios del sur de Lugo cuentan con la brigada forestal financiada por la Xunta y reciben su apoyo en materia de extinción de incendios. El único que ha renunciado a esta brigada es Monforte. Así, los medios propios de que disponen para la lucha contra incendios los ayuntamientos difieren de unos a otros. Por ejemplo, A Pobra do Brollón no dispone de ningún medio propio y no cuenta con parque de bomberos, algo que a juicio del alcalde, José Luis Maceda, hace que parezca que «os concellos pequenos non teñamos dereito a ese tipo de servizos».

Otras localidades, como la de Chantada o Sober, sí tienen vehículos acondicionados para estas labores, como carrocetas, camiones mixtos o, en el caso de Ribas de Sil, camionetas pequeñas de acción rápida. Esto pone de manifiesto que es muy difícil para las corporaciones municipales contratar personal para incendios y prefieren emplear su presupuesto en recursos materiales.

La valoración de los alcaldes

Todos los regidores de la zona sur de la provincia coinciden en que se enfrentan a un verano especialmente complicado. La sequía ha hecho que el terreno sea más propenso a arder y se espera que las temperaturas sean más altas que otros años. Folgoso do Courel es un municipio de especial riesgo por su amplio territorio de monte. Su alcaldesa, Dolores Castro, afirma que «con este verán tan perigoso vai haber que estar alerta».