El mejor fichaje del Calasancio

La monfortina Carmen Carballada jugará esta temporada en el infantil A del Calasancio. Con 12 años recién cumplidos, la joven promesa estudiantil encara su nueva etapa con ilusión y muy motivada. A la futbolista no le asusta el hecho de dar el salto al fútbol 11, al que se ha adaptado a la perfección esta pretemporada.

Su progresión no ha pasado desapercibida para entrenadores de algunos de los grandes clubes gallegos. En las últimas semanas, Carmen fue convocada por uno de los coordinadores del fútbol femenino del Deportivo para jugar con el Orzán, club vinculado a los coruñeses, el torneo organizado por el Sagrado Corazón. La deportista local fue una de las más destacadas, contribuyendo de manera decisiva a la consecución del trofeo.

La futbolista realizó una gran temporada a las órdenes de Carlos Fontal en el equipo infantil A del Calasancio. «Estoy gratamente sorprendido con Carmen. Se trata de una jugadora que compite a la perfección y que se ha adaptado rápido al equipo. Muestra mucho interés y está muy atenta a las instrucciones que le das», señala Carlos Fontal.

El preparador estudiantil confirma que la jugadora formará parte del Calasancio A toda la temporada. «Tiene mucho potencial e ilusión por jugar, y estoy convencido de que nos dará mucho», concluye.

Carmen reconoce que tenía ganas de dar el salto al fútbol 11. «Me apetecía mucho, porque supone dar un paso más en mi carrera y continuar cogiendo experiencia en el fútbol. Quiero seguir creciendo, porque mi sueño es llegar algún día a una categoría profesional», dice Carballada.

Las diferencias

La monfortina ha estado a la altura de lo que se esperaba durante la pretemporada. «Es verdad que el campo ahora se me hace más grande, pero me he adaptado a la perfección», señala la joven promesa local.

En los partidos de pretemporada, Fontal la ha alineado en el centro del campo, demarcación en la que se siente muy cómoda. «Me gusta mucho repartir juego, dar asistencias y marcar goles. Yo estoy a disposición del míster para jugar donde me mande», añade.

Si no se lesiona, todo parece indicar que este sábado estará en la convocatoria del Calasancio para el partido que los estudiantiles disputarán a domicilio ante el Areosa. Admite que le haría ilusión, pero es prudente. «Estoy entrenando mucho y trabajando a tope para que el entrenador me convoque. Quiero ayudar al Calasancio a conseguir sus objetivos», asegura.

Carmen comenzó a practicar deporte con tan solo tres años, y lo hizo en gimnasia rítmica. No obstante, a ella lo que realmente le gustaba era el fútbol. Una de las artífices de que comenzara a competir oficialmente fue su

gran amiga y compañera Clara Fernández. «Me llevó un día a ver un partido en el que jugaba con el Cidade de As Burgas. En el descanso salté a la pista y una

de las entrenadoras se interesó por mí. Así empezó todo y aquí

estoy», añade.

Su espejo, además de Clara, es Verónica Boquete, que en su campus le regaló las botas con las

que fue campeona de la Champions. «Me hacen especial ilusión, porque además llevan el color de la bandera gallega». En el

fútbol masculino tiene especial

predilección por el azulgrana Andrés Iniesta y por el madridista

Modric.

Fútbol sala

La jugadora compagina el fútbol con el fútbol sala, puesto que compite con el Cidade das Burgas en la liga provincial femenina. «Si se organiza uno, se pueden compaginar las dos modalidades y los estudios», concluye Carmen, que este curso se estrenará en la ESO.

En su currículo, la joven promesa cuenta con dos participaciones en el campeonato de España sub-12, competición en la que dejó destellos de la calidad técnica que atesora.