Nacho Rivero regresa al Club Lemos

El Lemos lo tuvo claro. Si se presentaba la oportunidad de reforzar el plantel lo intentaría. Y así ha sido. En las últimas horas el club que preside Óscar López anunció el regreso de Nacho Rivero. El fichaje del central soberino llega en el momento adecuado, ya que las lesiones están castigando al centro de la defensa. Alami continúa lesionado, y este fin de semana, Juanlu Bernal no podrá contar con el concurso de Panizo, que fue expulsado el pasado fin de semana.

Rivero lleva siete meses alejado de los terrenos de juego, ya que durante este tiempo estuvo preparando una oposición. La cosa no salió bien en este sentido, por lo que el soberino, que seguirá viviendo en Monforte, regresa a la que fue su casa la pasada temporada.

«Prefería volver ao Lemos noutras circunstancias, máis ledo, porque tería aprobada a oposición. Pero non se deu esa cuestión, polo que ao seguir aquí, nada mellor que facelo no equipo da vila», señala Nacho Rivero.

El jugador no tuvo solo la oferta del Lemos, sino que otros clubes llamaron a su puerta, pero Rivero se decidió por el equipo monfortino. «O feito de que a xente me amosara o seu cariño tamén influiu. Moitos afeccionados me pedían que volvese ao Lemos. Iso e o cariño que teño no vestiario foron decisivos para dar o si ao club», añade.

El nuevo jugador del Lemos comenzó a entrenar con el resto de sus compañeros el martes. Ante el aluvión de bajas que tiene el equipo, lo más probable es que sea convocado para el partido del domingo en A Pinguela ante el líder, el Montañeros.

Buen estado físico

No obstante, para que tenga continuidad aún habrá que esperar algunas semanas. «O míster sabe como son estas cousas. É verdade que veño nun bo estado físico, teño máis músculo, e o que me falta é coller pulmón», afirma.

Rivero vuelve al Lemos con el objetivo de ayudar al equipo. «Como xa fixen na anterior etapa, eu veño para arrimar o hombro e para que o Lemos acade os seus obxectivos. Quero devolver no terreo de xogo toda a confianza que deposita en min o club», concluye.

El nuevo refuerzo lemista es producto de la cantera monfortina, concretamente del Calasancio. Los técnicos del club lemista lo tuvieron claro desde el primer momento, y tras su paso fugaz por el Lemos B, Nacho ya se asentó en el primer equipo. De hecho, en el club tienen claro que es un central de largo recorrido para el equipo.

Rivero es un ejemplo de talento, trabajo, compromiso y espíritu de sacrificio. Todos estos factores se han alineado para que en la cantera local se vea uno de los primeros brotes verdes.

El fútbol base monfortino está necesitado de que más jóvenes promesas den el salto al primer equipo.