El alcalde de Taboada cuelga las botas

El alcalde de Taboada, Roi Rigueira, no defenderá más la portería de su club. El regidor ha decidido colgar las botas y poner punto y final a una carrera de 24 años. La llegada a la alcaldía y otras cuestiones de índole personal han provocado que uno de los mejores guardametas de la provincia haya decidido retirarse.

Y lo hace junto con dos compañeros y amigos, Poyán y Manu. Los tres recibieron un homenaje en los prolegómenos del partido amistoso que disputaron este domingo en el campo municipal de A Medela-Canti el Taboada y el Chantada Atlético, y que concluyó con triunfo local por 2-1. La directiva del Taboada les hizo entrega de una placa conmemorativa y de sus camisetas enmarcadas en un cuadro.

«É verdade que podía continuar xogando, pero decidín retirarme porque xa non dispoño de tempo, porque está a miña responsabilidade como alcalde e outras cuestións. E hai unha cousa que sempre tiven clara, e que se estou nun proxecto teño que estar ao 100%, e como non podo facelo esta campaña decidín dar un paso al lado», comenta el alcalde y exfutbolista del Taboada, Roi Rigueira.

El regidor admite que este domingo tuvo sensaciones encontradas. Estuvo contento, pero al mismo tiempo fastidiado. «Ledo, porque che recoñecen o teu traballo e a túa implicación todos estes anos, e fastidiado porque daste conta que esto remata», puntualiza.

Con 36 años, Roi Rigueira sigue teniendo tirón. Y es que este mismo verano recibió ofertas de otros clubes para seguir compitiendo. Pero el alcalde de Taboada es hombre de un solo club, tal y como demostró durante toda su carrera deportiva. «Sempre me debín ao Taboada en categoría sénior, e teño que dicir que ese sentimento de pertenza é unha máxima neste clube», asegura Rigueira.

Los primeros toques al balón los dio Roi con apenas tres años en su parroquia natal de Vilameñe. Y no fue hasta los 12 años cuando comenzó a jugar al fútbol de manera federada. Su primer club fue el Calasancio. Desde la entidad estudiantil pasó a la cantera de la SD Chantada y al Lalín. En estos clubes se formó como futbolista, y después ya fichó por su Taboada. Ahí estuvo toda una vida.

Un ascenso histórico

A la hora de analizar su trayectoria, Roi Rigueira reconoce que el recuerdo más bonito que tiene es el ascenso del Taboada a la Preferente Autonómica, categoría en la que estuvo una temporada. «Iso sempre quedará na memoria. Deu gusto ascender en Noia e facelo ante mil afeccionados. Aquilo non tivo prezo. Foi histórico», recuerda el alcalde.

La retirada de Roi al igual que las de Poyán y Manuel tiene una connotación histórica importante. Y es que se produce coincidiendo con las bodas de oro del Taboada. Sí, ya son 50 años de historia de este club clásico de la Primera Autonómica, y en dieciocho estuvo Roi.

Eso sí, aunque se retire oficialmente, al alcalde nadie le persuadirá de seguir disputando lo que él define como «pachangas». Además seguirá siendo un socio más y un fiel seguidor del equipo de sus amores.

Quién sabe si en el futuro da el salto a los banquillos. Madera y conocimientos tiene. El tiempo lo dirá.