El Gobierno entrega al Concello parte de la N-VI que inauguró hace 45 años

El 1 de julio de 1975 el entonces ministro de Presidencia, el lucense Antonio Carro, presidía la inauguración de la circunvalación de la N-VI en Lugo así como del puente de As Saamasas, de la carretera N-540 a Santiago y Ourense. Pues 45 años después, el tramo de la N-VI desde el enlace de la avenida das Américas hasta el puente blanco pasará a ser gestionado por el Concello, tras la petición del gobierno de Lara Méndez al Gobierno central. Este miércoles al mediodía se firmará el acuerdo entre la regidora y el delegado del Gobierno.

El Concello quiere que con el traspaso de los 2,3 kilómetros de la citada carretera pueda realizar las obras del plan Dusi y así agilizar permisos y trámites, sin depender el Ministerio de Transportes. La N-VI se ha convertido en una tercera ronda de la ciudad, con más de 23.000 vehículos diarios circulando por una vía casi urbana. El gobierno local pretende integrar las acciones de mejora del entorno del río Miño en la ciudad, y para ello necesitará ejecutar trabajos que afectan a la N-VI.

Además de la N-VI, el Concello asume la gestión de los accesos a la avenida dos Deportes, avenida das Américas, Rúa Santiago, accesos al puente blanco y al puente romano.

Mejoras en un puente con historia

El puente de As Saamasas, llamando nuevo durante muchos años, fue un hito en la historia de la ingeniería en España, con un vano de 108 metros que en su momento fue récord en el país. Inaugurado el 1 de julio de 1975 ha tenido mejoras en los últimos años, como las más recientes en sus juntas de dilatación. El pasado mes de julio comenzaron los trabajos de mejora de la baranda de sus casi 470 metros de longitud. En concreto se ha desmontado las de un margen para su lijado y pintado en el taller, para luego volverla a colocar, y a continuación se hará lo mismo con la baranda de la otra parte. Los peatones no pueden acceder a la acera de la zona desinstalada.