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El cinturón comarcal de Lugo, la maltrecha carretera de 131 kilómetros que atraviesa 12 concellos, tres autovías, tres nacionales y 9 vías autonómicas

Lugo

suso varela Lugo / La Voz
Estrechamiento en Ponte Vilar, sobre el Miño, en Castro de Rei

Este anillo que rodea la capital lucense, diseñado por Cacharro hace 40 años, es utilizado por tráfico de todo tipo y da servicio a una población alrededor de los 134.000 habitantes

24 Feb 2024. Actualizado a las 05:00 h.

La carretera de la Diputación LU-P-1611, conocida como cinturón comarcal de Lugo, está de actualidad por su mal estado de mantenimiento en varios concellos, como denuncian los alcaldes del PP, y por la propuesta del presidente provincial, el socialista José Tomé, de que la Xunta asuma las competencias de gestión de esta vía por su relevancia en la vertebración del centro de Lugo y por su longitud: 131 kilómetros a través de 12 concellos y cruzándose con tres autovías, tres nacionales y 9 vías autonómicas.

El cinturón comarcal tiene unas dimensiones y un alcance similares a las de una carretera principal, aunque su estructura y conservación digan lo contrario. A través de un anillo que rodea la capital provincial, se distribuyen 131 kilómetros de carretera con origen y llegada en Gomeán, en el enlace de la N-VI en O Corgo.

La carretera atraviesa villas y parroquias de 12 concellos: O Corgo, O Páramo, Lugo, Guntín, Friol, Outeiro de Rei, Begonte, Cospeito, Castro de Rei, Pol y Castroverde, aunque por proximidad se podría incluir Láncara y otros municipios cercanos, ya que el cinturón comarcal acaba cruzándose con hasta 15 vías principales.

En concreto, la LU-P-1611 cruza:

Una joya de Cacharro

En los años ochenta del pasado siglo, cuando Francisco Cacharro comenzaba a mandar en la Diputación de Lugo, se comenzó a diseñar lo que se denominó cinturón comarcal como una infraestructura prioritaria, tal y como señalaba un documento del gobierno provincial de 1985: «La Diputación establecerá rutas básicas de carácter comarcal y provincial, como el cinturón comarcal de Lugo, un recorrido en torno a la capital de 150 kilómetros y una inversión superior a los 3.000 millones de pesetas».

Nace así una de las joyas de la Diputación y de los mandatos de Cacharro, que entre los años 80 y 90 fue impulsando por fases la construcción, adecuación y mantenimiento de esta carretera, en ocasiones aprovechando tramos ya hechos, y en otros, completando el citado anillo.

La construcción no estuvo exenta de polémicas (denuncias por daños a elementos patrimoniales, como sucedió en Bascuas, en Castroverde), o debates ahora olvidados, como la necesidad de hacer una circunvalación por Castro de Rei y sacar el tráfico que aún atraviesa el centro de la villa.

Una carretera que vertebra a casi 134.000 habitantes

El cinturón comarcal es una carretera que de forma directa atraviesa parroquias de doce concellos, cuya población suma casi 134.000 habitantes, el 38 % de la población provincial (incluidos los de Láncara, por proximidad). Al ser una vía de 131 kilómetros su uso y su tráfico varía en función de los tramos.

Puede llegar a ser una vía de intenso paso de camiones y vehículos entre el corredor de Sarria y la A-6 (se evita tener que ir hasta Nadela), una carretera con numerosos tráfico agrícola (Castro de Rei, Guntín, Friol), una carretera empresarial (pasa por los polígonos de Begonte, O Corgo y Castroverde), calle principal de villas (Castro de Rei) o para unir parroquias con núcleos importantes que quedan cerca, como Lugo ciudad, Rábade, Castro de Ribeiras de Lea, Palas de Rei, Feira do Monte o A Pobra de San Xiao. Por este motivo, el alcance del cinturón comarcal es más amplio que los concellos por los que pasa.

Pero el mal estado de conservación de la mayor parte de la carretera provoca que el tráfico acabe siendo local en bastantes tramos, aunque también hay profesionales del transporte que la utilizan para acortar recorridos en tiempos de combustible con precios elevados.

José Tomé, presidente de la Diputación: «É unha estrada que claramente debe ser de titularidade da Xunta»

El presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, anunció el pasado octubre en el Parlamento de Galicia que el organismo provincial asumía competencias que debería ser del gobierno gallego, especialmente las relacionadas con las residencias. Pero también puso se manifiesto la necesidad de que la Xunta asuma vías que vertebran provincias, como la que une Momán con As Pontes, o varios concellos, como el cinturón comarcal.

Preguntado sobre esta propuesta al gobierno gallego, Tomé es muy claro: «O cinto comarcal é claramente unha estrada que debe ser de titularidade e competencia da Xunta de Galicia porque, cunha lonxitude de 137 quilómetros, vertebra todo o centro da provincia, e ten unha entidade e prestacións mesmo superiores a moitas outras que a día de hoxe pertencen á Administración autonómica. É un dos claros exemplos de vías provinciais que deben ser asumidas pola Xunta, xunto coa estrada de Momán-As Pontes (LU-P-2204), que une dúas provincias».

Tomé asumió la presidencia provincial hace casi cinco año. Desde el 2019, la Diputación ya lleva invertidos o comprometidos 3,25 millones, de ellos 900.000 euros en 10 kilómetros de Guntín, 876.000 en 8 kilómetros entre Friol y Begonte y 510.000 en el puente de Bascuas entre Pol y Castroverde.

José Ángel Santos, alcalde de Friol: «Debería haber un plan para tela en condicións porque é fundamental»

Si hay un alcalde que ha cogido la bandera de la necesidad de reformar el cinturón comarcal es el de Friol, el popular José Ángel Santos, el municipio que más kilómetros tiene de la LU-P-1611. Más allá de que hace unas semanas amenazó con llevar al juzgado a la Diputación si no se arreglaban las carreteras provinciales en Friol, Santos considera el cinturón comarcal una vía fundamental para la vertebración del centro de la provincia, al conectar varias autovías y vías principales.

«Moitas empresas están esperando pola mellora da conexión entre Palas de Rei e Begonte pasando por Friol, que supón unir a A-54 e a A-6», señala Santos. El alcalde popular, preguntado por si el cinturón debería ser transferido a la Xunta, indica que «se a Deputación non é capaz de manter a vía en bo estado, si que se podería abrir unha negociación, porque o importante é que os condutores teñan unha estrada sen perigo», pero a la vez indica: «Pero esta petición o que demostra é que non houbo unha planificación no tempo para ter esta vía en óptimas condicións, porque eu tamén teño centos de quilómetros de vías municipais, e podería pedirlle á Deputación que se fixera cargo delas». Santos cree que es necesario diseñar una planificación «para facer óptimas e seguras as estradas provinciais».


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