Las «selvas» urbanas ya no dejan ver numerosas señales

A este paso, y si la desbrozadora o la sulfatadora no llegan, las señales de algunas vías públicas acabarán cubiertas por la maleza. Y no es necesario irse a zonas de montaña o alejadas de poblaciones. Están al pie de la ciudad.

Hasta hace unos pocos días, los conductores que accedían a la Volta da Viña desde la N-VI para subir a la ciudad podían «tragarse» perfectamente un stop. Estaba cubierta de maleza a la que alguien dio «fouciña» en los últimos días.

No es un caso aislado. Mientras ayer una empresa de A Coruña tenía varias máquinas desbrozando una de las márgenes de la A-6 en la zona de Guitiriz, la desbrozadora no llega a la N-VI. Cualquier conductor que salga a la misma desde el enlace del campus y enfile dirección a A Coruña, no se percatará de algunas de las señales. Están tapadas por las ramas de los carballos en un caso y en otro por la maleza que ya está a punto de superar las piezas metálicas.

Hay desatención evidente y parece que la seguridad vial es lo de menos. Algunos conductores aseguran que la maleza no se corta en ese tramo para que los conductores no vean los coches radar que frecuentemente se colocan en dicho punto. Otros dicen que habrá siega en el momento de que alguien haga un buen informe fotográfico y lo presente como recurso para alguna multa.

En el repaso efectuado ayer a algunas de las vías que llegan a la capital lucense puede comprobarse que una de las que mejor situación presenta es la N-540. En esta no hubo desbrozadora, pero sí sulfatadora. Fueron utilizados productos químicos para quemar las hierbas que trataban de invadir la calzada. Esa es la solución empleada también por ADIF, titular de la vía férrea que atraviesa buena parte de la provincia lucense, para hacer limpieza.

Las rotondas de acceso a la ciudad pasan por situaciones diferentes. Las hay que se encuentran bien desbrozadas y otras que presentan estados muy curiosos. Es el caso de la de As Saamasas. Está bien atendida en líneas generales, pero sorprende que en algunas zonas dejasen a modo de jardín de diseño la hierba de por lo menos medio metro de altura.

La zona de A Louzaneta presenta un estado totalmente selvático. Hay señales que no se ven y otras que, pese a su altura, ya comienzan a verse superadas por las maleza. No se salvan las carreteras de la red municipal. El Concello de Lugo puso en marcha la campaña de roza. Vecinos de algunas parroquias tuvieron que acometer ellos mismos la limpieza para que los caminos no llegaran a ser cubiertos.

Algunos vecinos hicieron ellos por su cuenta el desbroce para mejorar los viales