Las bajas obligan al Azkar a doblar el esfuerzo ante Playas

Castellón iba a suponer el debut liguero de dos hombres de la vieja guardia del Prone, pero el retraso en la tramitación de la ficha del hispano-peruano Walter lo dejará sólo en el estreno de Manolo Vázquez como segundo entrenador. El Azkar necesitará todo el coraje que impone el también director deportivo del club para superar al Playas en su pista ( 17.00 horas, media hora antes en Radio Voz ). Y no sólo por el prestigio del rival, sino más bien por las ausencias lucenses. Albes, con un esguince de tobillo, se une a la ya de por sí crucial baja de Vinicius. Miguilla, del filial, se ha unido a la expedición lucense. «A estas alturas de campeonato necesitamos puntuar donde sea, sin mirar la entidad del rival», matiza Pablo Prieto. El primer entrenador del Azkar lamenta las ausencias, aunque prefiere centrarse en los jugadores que están disponibles. «Los que están aquí tienen que hacer que olvidemos a los que no pudieron venir y es importante no pensar en ellos», apostilló el técnico naronés, que en la tarde de ayer dirigió el último entrenamiento, ya en Castellón. Los lucenses estarán con un ojo en Madrid, donde Carnicer y Barcelona disputan un encuentro vital en las expectativas del Azkar de conservar la categoría, y otro en Vander Carioca, que con 32 goles es uno de los hombres más peligrosos de los de Tino Pérez. El técnico del Playas, amigo del preparador físico del conjunto transportista ya anunció que no seguirá la próxima temporada en Castellón. Para Chicho, que llegó a Lugo de la mano de Prieto, «por soñar, podemos hacerlo con la victoria, aunque tampoco sería un mal resultado un empate».