Joaquín Polvorinos, de Pol 3.14: «La Casa de Papel no es mal escaparate para mí»
Pol
El músico madrileño actuará esta noche en el Espazo Fest que se desarrolla en el Pazo de Urzaiz
12 Aug 2022. Actualizado a las 05:00 h.
El Pazo de Urzaiz, en Nigrán, acogerá a partir de las 21.00 horas (entrada de 12.00 euros) un concierto de Pol 3.14, proyecto musical liderado por Joaquín Polvorinos, que ha conseguido poner una canción, No Time, en la serie La Casa de Papel.
—¿De dónde viene el nombre del grupo?
—Viene de esas tonterías que surgen cuando no sabes qué nombre poner, aunque con el paso del tiempo hasta te gusta. Esa era la hora a la que le decía a mi madre que me despertara de la siesta para ir al colegio. Vivía a escasos metros del colegio, por lo que me daba tiempo a echar una siesta después de comer, a las 3. 14.
—¿Es casualidad que haya colocado varias canciones en series muy populares?
—A veces son las casualidades de la vida, pero en el caso de La Casa de Papel fue porque había trabajado con ese mismo equipo en Los hombres de Paco; me preguntaron si tenía alguna canción que mereciera estar en la serie, y les ofrecía algunos bocetos. Escucharon No Time y la eligieron.
—¿No teme que el público solo le conozca por esa canción?
—Sin ser presuntuoso, creo que tengo tres o cuatro canciones que se han quedado ahí para siempre. Que son conocidas por las series en las que estaban, pues sí, pero es que si no tienes ciertos apoyos para promocionarte es como si no hubieras hecho nada. Así que creo que La Casa de Papel no es un mal escaparate para mí. Llevo mucho tiempo buscándome la vida y, algunas veces, estoy en primera línea y otras no tanto, pero yo he seguido haciendo canciones y gracias a Dios sigo vivo.
—¿Tienen sus canciones unas características comunes?
—No. Yo me siento en una silla y sigo aquello que empieza a brotar en mí. A veces, me despierto y tengo una melodía en la cabeza, y ya la transformo en acordes y empiezo a hacer una letra; en este aspecto soy bastante visceral.
—¿La melodía es lo primero?
—Suele ser así, aunque también hay canciones, como es el caso de Jóvenes eternamente, en que empecé con las palabras que me saltaban en la cabeza. Cuando estoy muy cansado porque he dormido mal se abre una puerta extraña e incontrolable; esos días, suelo hacer muchas cosas.
—¿Se siente más cómodo en los medios tiempos?
—Es verdad que tengo bastante de ese rollo, pero, después, mi puesta en escena es bastante rock and roll. Ocurre que alguno de esos medios tiempos han tenido mucha repercusión, pero tengo canciones bastante cañeras en mi repertorio. Pero, sí, si esas canciones les han gustado a la gente, qué voy a hacer.
—¿Cómo lleva su repertorio al directo?
—Somos una banda de rock y al directo no llevamos ni secuencias; vamos a pelo y le damos mucha zapatilla. En nuestros conciertos no hay nada bastante impostado, es una banda en la que hay bastante pureza. Cuando llevo mis canciones al directo, casi siempre ha sido un power trío.
—Los jóvenes parecen más interesados por el reguetón y hip hop que por el pop y el rock. ¿Cómo lo ve?
—El reguetón ha entrado muy fuerte y los medios le están dando mucha bola a ese estilo, pero el pop y el rock no pueden desaparecer. Yo creo que siempre vamos a estar ahí, es la música que a mí me gusta, pero es que además no sé hacer otra. Evidentemente, en las discotecas sí se pone esa música, pero luego, la gente también escucha la música con alma.