Claves para invertir en letras del Tesoro
Mercados
La rentabilidad de estos activos, que gozan de la máxima seguridad al contar con el aval del Estado, compensa la inflación
06 Oct 2023. Actualizado a las 11:57 h.
Obtener un 4 % de rentabilidad por una inversión a corto plazo y un nivel de riesgo prácticamente inexistente parecía un sueño hace solo un año. Este verano ha sido casi una realidad al alcance de todos aquellos ahorradores con al menos 1.000 euros disponibles para ponerlos a trabajar en un producto financiero muy conservador, las letras del Tesoro. Las emitidas a nueve meses se colocaron a un tipo de interés medio del 3,788 % en la subasta del pasado 11 de julio.
El martes, 8 de agosto, el Tesoro Público español ofreció de nuevo estos activos a los inversores. Lo hizo con un rendimiento algo inferior, si se tiene en cuenta el resultado de la colocación de letras a 6 y 12 meses: las emitidas a un año vieron reducida su rentabilidad desde el 3,775 % al 3,664 %, reflejando un cambio en las expectativas de la política monetaria en la zona euro. El próximo miércoles habrá nueva emisión a 3 y 9 meses. Aún así, los intereses que paga el Estado a los tenedores de letras compensan la pérdida de poder adquisitivo por la inflación: la española acabó julio en el 2,3 %. Además, el interés que ofrecen las letras a doce meses multiplica por 2,8 veces el rendimiento medio de los depósitos bancarios españoles hasta el mismo plazo: al cierre de abril se situaba en el 1,33 %, según los datos de Eurostat.
Estas son las principales claves para manejarse con estos activos.
Qué son las letras del Tesoro
Son valores de renta fija a corto plazo emitidos por el Estado a través de la Dirección General del Tesoro. Esto significa que gozan de la máxima seguridad al contar con el aval del Estado. Están representados exclusivamente mediante anotaciones en cuenta, es decir, sin que exista el título físico. Se crearon en junio de 1987, cuando se puso en funcionamiento el Mercado de Deuda Pública en Anotaciones.
El importe mínimo de cada petición es de 1.000 euros, y las solicitudes por importe superior han de ser múltiplos de 1.000 euros.
Se emiten mediante subastas competitivas. Actualmente se celebran dos al mes. En la primera se colocan letras a 6 y 12 meses, y la segunda se dedica a los títulos a 3 y 9 meses. Se puede consultar el calendario completo del año en la página web del Tesoro Público.
Cómo se consiguen los rendimientos
Son valores emitidos al descuento o a premio, por lo que su precio de adquisición puede ser inferior o superior al importe que el inversor recibirá en el momento del reembolso. La diferencia entre el valor de reembolso de la letra (1.000 euros) y su precio de adquisición será la rentabilidad generada.
La progresión de los rendimientos está ligada a la evolución de los tipos de interés y no siempre es positiva. Cabe recordar que entre marzo del 2020 y mayo del 2022, los inversores pagaban al Tesoro por prestarle dinero a doce meses. La última subasta del 2022, celebrada el pasado 7 de diciembre, se saldó con un interés medio del 2,04 % para los seis meses y el 2,44 % para los 12 meses. En esa fecha, el Banco Central Europeo (BCE), que había empezado a subir los tipos de interés cinco meses antes, aún no había elevado el precio oficial del dinero hasta el 2,5 %.
Cuál es el plazo que más interesa
Las diferencias de rentabilidad que ofrecen los cuatro distintos plazos no son muy significativas. No obstante, si se quiere maximizar el rendimiento, hay una llave para determinar qué plazo conviene escoger: la previsión sobre los tipos de interés del BCE.
Si se apuesta por nuevas alzas, es mejor invertir con un horizonte más corto, lo que permite recuperar el dinero más rápidamente sin tener que hacer frente al coste de oportunidad que supone mantener el dinero cautivo durante un mayor número de meses. Esto otorga flexibilidad para reinvertir de nuevo más adelante con intereses más altos.
Si se considera que el precio del dinero está cerca de su techo, es preferible optar por las letras con los vencimientos más largos para asegurarse tipos más altos (aunque solo lo sean por muy poco) durante más tiempo.
Cómo comprar
Los inversores particulares pueden comprar letras del Tesoro tanto en el mercado primario (cuando se emiten) como en el secundario (una vez que están en circulación y empiezan a negociarse).
La vía más sencilla para adquirir estos productos es hacerlo directamente, bien en cualquier oficina del Banco de España o través de la página web del Tesoro (www.tesoro.es). Para ello es preciso contar con una cuenta en el Banco de España, que puede abrirse desde la sede de la propia institución en cada provincia. En el caso de querer realizar la adquisición de letras por internet, se requiere tener activado el DNI o el certificado digital electrónico.
También se puede comprar indirectamente, en oficinas bancarias, sociedades y agencias de valores.
Si se opta por invertir en letras del Tesoro a través del mercado secundario de renta fija, hay que tener en cuenta que se conseguirán con la rentabilidad a la que coticen en cada momento. Proporciona la posibilidad de comprar sin necesidad de esperar a las subastas mensuales. Al mismo tiempo facilita la venta del activo en el caso de que se necesite recuperar la inversión antes de que se produzca el vencimiento establecido.
Qué comisiones hay que pagar
Las compras directas de letras del Tesoro en el Banco de España tienen unas comisiones muy reducidas, de apenas 1,5 euros por cada 1.000 euros de inversión, con un mínimo de 0,9 euros y un máximo de 200 euros sobre el importe transferido. Si se adquieren indirectamente en una oficina bancaria, las comisiones son tan elevadas que las propias entidades remiten a los clientes a los organismos públicos.
Los costes de la operativa en las plataformas de bonos varían dependiendo del bróker que los ofrece. En GVC Gaesco, por ejemplo, aplican una comisión de intermediación del 0,1 % sobre el efectivo, lo que no incluye los cánones del mercado. En Renta 4, el coste es del 0,1 % sobre el nominal en operaciones por teléfono. En Auriga Bonos, la comisión sobre el efectivo contratado en transacciones de deuda pública nacional e internacional es del 0,25 % con un mínimo de 10 euros por operación.
Cuál es el tratamiento fiscal
Los rendimientos están exentos de retención a cuenta tanto en el ámbito del IRPF como en el del Impuesto sobre Sociedades, sin perjuicio de que haya que incluirlos en la declaración anual de dichos impuestos.
Como cualquier producto de ahorro, el rendimiento generado por la venta o amortización de las letras, cualquiera que sea su plazo, tributa al tipo del 19 % si es inferior a 6.000 euros. Se paga el 21 % si se obtienen entre 6.000 y 50.000 euros; y el 23 % si supera los 50.000 euros.
Apostar por la vía de los fondos de inversión monetarios
Para rentabilizar los ahorros aprovechando el buen momento de los activos de renta fija a corto plazo también se puede recurrir a los fondos de inversión monetarios, que no solo invierten en letras españolas sino también en letras de otros países y de empresas, que ayudan a que el rendimiento pueda aumentar, según Víctor Alvargonzález, socio fundador y director de estrategia de la firma de asesoramiento independiente Nextep Finance. Además de la diversificación, otra de las ventajas que ofrece invertir a través de esta vía es que se puede comprar a partir de cantidades sustancialmente inferiores a los 1.000 euros que requieren letras del Tesoro español. Por ejemplo, la participación mínima en el Renta 4 Fondtesoro Corto Plazo FI asciende a 10 euros, mientras que en el GVC Gaesco Fondo Fondtesoro Corto Plazo FI es de solo 1 euro.