Fernando Pumar, lateral: «Si recupero el nivel de antes de la lesión puedo ser importante para el Racing»
Opa Racing
El ourensano, inmerso ya en el grupo, quiere minutos para demostrar y ganarse una plaza
18 Jul 2023. Actualizado a las 21:06 h.
¿Volverá Fernando Pumar a tocar el miércoles balón en un partido con el Racing? Por el momento es una incógnita si, nueve meses después de una grave lesión —rotura del ligamento cruzado anterior y menisco interno de la rodilla izquierda— el racinguismo podrá disfrutar del lateral. Pero, lo que no le falta son ganas y motivación. «Tengo muchísimas. He estado trabajando en verano, pero no he hecho fútbol real», reconoce.
—Antes de nada, ¿cómo se encuentra? ¿Está ya integrado en la dinámica del equipo?
—El lunes fue el primer día que hice un entrenamiento completo, con total normalidad. Estos días son los primeros que disputo de cabeza un balón con contrarios, centro, voy al suelo a robar un balón... Hasta entonces estaba o con Señé y Chuca haciendo un poco de trabajo con el grupo y otro por nuestra cuenta.
—Llega a tiempo tras un verano intenso de trabajo.
—Las tres semanas de vacaciones han sido trabajo, trabajo y más trabajo. He estado haciendo trabajo de fuerza y de campo por mi cuenta para recuperar la rodilla a nivel de giros, saltos, recepciones... Y los fines de semana para despejarme. Uno aproveché para ir al Son do Camiño, otro para estar con los colegas en San Juan y otro volví a casa a ver a la familia. Desconectar, poquito, pero sarna con gusto no pica.
—Se ha preocupado por seguir su recuperación y está entrenando con el equipo, pero ¿cómo está su situación con el club?
—En el primer momento en el que el club habló conmigo las dudas que tenía sobre que me quedase o no a formar parte de la plantilla estuve con un poco de bajón, un poco triste. Pero le di vueltas en mi cabeza unos días. Y volví a hablar con ellos para plantearles hacer la pretemporada para demostrarles que estoy bien, que me puedo quedar porque puedo ser importante en esta plantilla. Ya no solo a nivel de juego, de subir el nivel en pretemporada, sino que quiero poder tener minutos para demostrar que puedo jugar en Segunda División. Me transmitieron que irán viendo cómo transcurren los entrenos y cómo me voy encontrando pero también lo que pueda aparecer en el mercado.
—Es un extra de presión.
—Intento no pensarlo demasiado y centrarme en estar yo bien. Se que si recupero el nivel que tenía antes de la lesión tengo opciones de quedarme y ser importante en el Racing. Mi único objetivo es rendir bien.
—La lesión vino en uno de sus mejores momentos en Ferrol.
—Es que el momento del equipo ayudaba a que los jugadores diésemos nuestro mejor nivel. La temporada anterior tuve más altibajos pero al final acabé haciéndome con el puesto y siendo importante también. Y llegaba de esa dinámica, sabiendo lo que el míster quería y más adaptado a los compañeros, que llevábamos ya algunos dos años juntos. La idea intentar recuperar ese nivel o mejorarlo si se puede.
—Para un jugador de su talla, ¿cómo es vivir una temporada tan importante desde al grada?
—Estás en el día a día, en el vestuario... pero no participas de la misma forma que los compañeros. A todos lo que nos gusta es el balón, el fútbol y sentirte uno más. Así que estoy con ganas de volver, también por esas pequeñas molestias que tuve en el gemelo al final de temporada pasada, que me impidieron terminar haciendo un mes con el grupo.
—¿Cómo vivió la temporada?
—Ver tantos partidos desde fuera hizo que fuese un año muy extraño. Yo ya les había dicho en la pretemporada a mis compañeros que estaba más que convencido de que lo íbamos a conseguir, que íbamos a quedar primeros y ascender. Con el paso de las jornadas muchos fueron creyendo que podía pasar. Y de hecho, a falta ya de dos o tres semanas, cuando íbamos a jugar contra el Córdoba, les dije que si les ganábamos y al Unionistas nos poníamos ya líderes. Me equivoqué por una semana. Tenía tan claro que estaba para nosotros.
—Y llegó el emocionante ascenso.
—La verdad es que lo pasé un poco intranquilo hasta que nos quedamos con uno más, empezamos a apretar más y a tener más ocasiones. Esa semana estuve, la verdad, un poco fastidiado porque me habría gustado vivirlo en el campo, pero en el momento en el que acabó el partido solo pensé en saltar y celebrarlo.
—¿Con qué momento se queda?
—Con el ascenso. Aunque me costó un poco al principio por no poder estar en el campo, creo que es el premio a el trabajo de años del club. Cuando metimos el 2-0 me abracé en la cabina con Jose dos minutos, los dos llorando como niños pequeños... Es uno de los momentos que probablemente nadie vivió y no olvidaré.
—Toca el primer amistoso, un primer test para empezar a rodar.
—Todavía tienen que llegar muchos jugadores a la plantilla, pero hay ganas de empezar a hacer fútbol real porque para muchas tareas estamos un poco limitados por el número de jugadores.
—¿Espera tener minutos?
—No he comentado con el míster su idea ni con el nuevo preparador físico, pero entiendo que como he empezado esta semana con el grupo, igual en este primer partido me dan menos minutos o los tendré el siguiente el sábado.
—¿Qué le dice la afición?
—Recibo muchísimo cariño. Creo que también lo han visto reflejado en el campo desde siempre. Estoy muy a gusto en Ferrol. Son muchos aquí, está podría ser mi octava temporada... Y ya dije cuando conseguimos el ascenso que es la leche lograrlo en casa después de haber jugado seis playoff en mi carrera sin conseguirlo. Era muy importante para mí, pero que fuese en Ferrol lo hace todavía más significativo.
—Y si finalmente el futuro le depara en Segunda con el Racing, ¿qué objetivos se marca?
—El principal objetivo del club, esté yo o no, debe ser asentarse en la categoría. Y después la competición dirá donde tenemos que estar. Este año, que vendrán rivales de más entidad, seguro que crece este impresionante ambiente que vivimos en A Malata. Esto es un premio también para la afición, que pueda disfrutar de buenos rivales. Y nosotros esperemos estar a la altura. Es lo que hemos vivido es una pasada. Ver a todos los niños pequeños de Ferrol con la camiseta del Racing.