Nacho, Dorrío y Buñuel, los héroes del Racing de Ferrol en El Molinón

Nacho Sánchez, Josué Dorrío y Aitor Buñuel anotaron los tantos que dieron el triunfo al Racing de Ferrol en El Molinón por 1-3. Para los tres fue su primer tanto en la Liga, ya que Nacho ya había marcado aunque en la Copa del Rey. Los tres aparecieron en el momento justo, en un partido decisivo en el que al Racing solo le valía ganar.

Los ferrolanos, salvo el accidente frente Oviedo, siempre habían cumplido en defensa, el ataque fue siempre al gran talón de Aquiles de este equipo. El Racing no solo no marcaba goles, sino que tampoco creaba un buen número de ocasiones, se llegaba a los tres cuartos de campo y ahí se apagaba la luz. La luz se encendió en el momento justo, en El Molinón, en un partido en el que había que ganar sí o sí. El Racing renunció a la posesión de balón, a tocar y tocar en el medio campo con poca productividad, este vez se buscó el juego directo, el llevar el balón arriba de la mejor manera posible. El acierto en ataque fue total, los ferrolanos solo dispararon siete veces a portería, en tres ocasiones entre los tres palos, las acciones que acabaron en gol. Mayor afectividad es imposible.

En el primer tanto, Nacho Sánchez, que cada partido que pasa rinde a un mayor nivel, no se lo pensó. Disparó fuerte desde fuera del área y el portero se comió el balón; el segundo gol llegó por el carril central, tras una buena asistencia de Gelardo, que aprovecha Dorrío para batir al portero asturiano. El gol más bonito fue el tercero, en tres o cuatro pases el equipo se plantó en el área rival. al lateral derecho, Buñuel, que se había sumado al ataque, hizo una pared perfecta con Dorrío y ya dentro del área finalizó con destreza.

Tres jugadores a los que este gol tiene que suponer oxígeno en las venas, jugadores a los que no les ha salido casi nada en este temporada, pero que por fin han podido ayudar al equipo. Se reivindicaron en El Molinón.

La victoria en Gijón tiene que ayudar al Racing a creer en sus posibilidades y sobre todo a ser consciente de que solo con la máximo entrega y concentración se pueden ganar partido en una categoría tan complicada. El miércoles llegará el Almería al campo de A Malata, otro hueso duro de roer. El Racing deberá salir igual, convencido de que puede ganar.